Tema 22 – El proceso de hominización y cultura material. La aportación de la antropología histórica.

Tema 22 – El proceso de hominización y cultura material. La aportación de la antropología histórica.

1. DIFERENTES HIPÓTESIS SOBRE EL ORIGEN DEL HOMBRE EN EL TRANSCURSO DE LA HISTORIA.

1.1. HIPÓTESIS SOBRE EL ORIGEN DEL HOMBRE EN LA ANTIGÜEDAD.

1.2. EL SIGLO XIX Y LA TEORÍA EVOLUCIONISTA DE DARWIN.

1.3. HIPÓTESIS RECIENTES SOBRE EL ORIGEN DEL HOMBRE.

2. FACTORES DE HOMINIZACION Y PROCESO DE EXTINCIÓN DE LOS ANTROPOIDES FÓSILES.

3. DATOS PALEO ANTROPOLÓGICOS SOBRE LA FORMACIÓN HUMANA.

3.1. EL PRIMER ESTADIO HUMANO.

3.2. LOS PRIMEROS HOMINOIDEOS DE ÁFRICA.

3.3. LOS PRIMEROS HOMÍNIDOS EN ASIA ORIENTAL.

3.4. LOS PRIMEROS HOMÍNIDOS EN EUROPA.

3.5. LOS NEANDERTHALES.

3.6. LOS PRIMEROS HUMANOS MODERNOS. EL HOMO SAPIENS SAPIENS.

4. CULTURAS MATERIALES DURANTE EL PALEOLÍTICO.

5. LA APORTACIÓN DE LA ANTROPOLOGÍA HISTÓRICA.

5.1. EL PROCESO DE HOMINIZACION A TRAVÉS DE LA VISIÓN ANTROPOLÓGICA.

6 BIBLIOGRAFÍA

1 DIFERENTES HIPÓTESIS SOBRE EL ORIGEN DEL HOMBRE EN EL TRANSCURSO DE LA HISTORIA

En su obraAnnales veteris et novi Testament, publicada en 1650, el arzobispo de Armagh, James Ussher, fija con pasmosa seguridad la fecha de la aparición de Tierra. Basándose en datos bíblicos, llega a la conclusión de que la Tierra había sido creada en el año 4004 antes de nuestra Era. Con posterioridad, otro clérigo, Lightfoot, llegó a precisar aún más ese cálculo: la Tierra había sido creada un 23 de octubre a las 9 de la mañana.

Durante milenios el problema del origen del hombre ha exigido insistentemente una solución. Desde que se demostró que la interpretación religiosa no era verdadera (origen milagroso de los primeros hombres) el enigma continuo siéndolo hasta que Darwin, con su teoría materialista sobre la evolución del mundo orgánico demostró la unidad de origen entre el hombre y los animales. La tesis del origen del hombre a partir del mono se convirtió en uno de los fundamentos de la teoría antropogenica y en la clave de la antropología.

Actualmente, ni la biología ni la antropología son capaces de explicar de manera totalmente satisfactoria el proceso de la antropogenia.

HIPÓTESIS SOBRE EL ORIGEN DEL HOMBRE EN LA ANTIGÜEDAD

Además de los mitos religioso-culturales que explican el origen del hombre como resultado de un milagro divino, en la Antigüedad también aparecen hipótesis naturalistas, claramente expresadas, en las que el hombre surge de la naturaleza como todas las demás cosas vivas:

El poeta romano Tito Lucrecio Caro así lo narra en su poema “De la naturaleza de las cosas”. El pensamiento de Lucrecio tiene su origen en las obreras de los sabios griegos que ya dejaron clara constancia de las similitudes entre el hombre y los demás mamíferos.

Hipócrates y muy especialmente Aristóteles investigaron minuciosamente el cuerpo humano. Además Aristóteles indico el lugar que el hombre ocupaba en el reino animal. Posteriormente, Galeno llegó a establecer la gran semejanza entre la constitución corporal humana y la simiesca.

Las más importantes en el mundo judeocristiano fuerondurante largo tiempo las teorías fijistas (defendidas por la Iglesia) como la teoría diluviana y la catastrofista de Cuvier. Desde el siglo XVIII y durante el XIX, las teorías fijistas serán abandonadas frente a las nuevas evolucionistas.

EL SIGLO XIX Y LA TEORÍA EVOLUCIONISTA DE DARWIN

La idea de que la naturaleza evoluciona (teoría evolucionista) comenzó a aparecer cada vez mas frecuentemente en el pensamiento científico del siglo XIX, hasta que finalmente Darwin logró, basándose en las leyes del desarrollo del mundo orgánico e inorgánico, enlazar en un todo único una gran cantidad de datos y hechos que el había ido recopilando. En su obra “El origen délas especies por medio de la selección natural”, considerada como un clásico de las ciencias naturales, da a conocer el principio de la selección artificial bajo influencia del hombre, como variaciones adquiridas y constantemente utilizadas con un fin , que terminarían por volverse estables y transmisibles vía herencia genética. Paralelamente investigo concretamente sobre el origen del hombre, usando los conocimientos geológicos, antropológicos, (vestigios fósiles de seres humanos de tipo primitivo) anatómicos, fisiológicos, embriológicos, taxonómicos, paleontológicos, zoológicos, parasicológicos, patológicos y psicológicos. Una vez agrupadas todas las pruebas en todos los diferentes campos del saber, pudo afirmar con toda seguridad , que los antepasados inmediatos del hombre habían sido monos fósiles de la era terciaria que habitaron en las regiones tropicales del viejo mundo. Estos individuos evolucionaron. Como causas evolutivas señala los cambios climáticos y la disminución de la superficie boscosa. Todo ello debió obligar a estos antropoides a pasar de los árboles al suelo en busca de sustento, lo que tuvo que reflejarse necesariamente en la forma de desplazarse. Este seria el contexto que explicaría el transito hacia la locomoción bípeda y la consiguiente liberalización de las manos. Este cambio influyo poderosamente en toda la evolución posterior consistente en fabricación de herramientas, modificaciones en el cerebro, aparición del lenguaje…etc.

Según Darwin los principales factores biológicos de transformación del hombre en mono fueron:

La selección natural

La influencia de la presencia o ausencia del ejercicio físico.

La selección sexual

La variabilidad

Las influencias del medio

La reproducción

La herencia

Otros factores desconocidos

Actualmente la valoración de la teoría darwinista, sin menoscabo del importantísimo paso hacia adelante que supuso, se valora como atrofiada a causa de su enfoque excesivamente biologista. Darwin no pudo llegara una visión clara de la antropogenia como algo esencialmente diferente de la evolución biológica de los monos y demás animales, ya que su interpretación del proceso fue una transformación gradual del mono en hombre. Aunque intentó considerar los factores sociales, no pudo valorarlos acertadamente y se mantuvo muy lejos de calibrar el papel del trabajo en el proceso de antropogenia.

HIPÓTESIS RECIENTES SOBRE EL ORIGEN DEL HOMBRE

Algunos biólogos como Frederick Wood Jones, intentan sustituir las ideas de Darwin sobre la evolución del hombre a partir de un mono antropomorfo fósil, por otras según las cuales el origen sería a partir de otros priinates. Según este científico la derivación sería a partir de un tarsino del Terciario inferior.

Otra teoría actual procede del paleontólogo Henry Fairfield Osborn, según el cual, los antepasados terciarios del hombre ya poseían casi todas las cualidades del hombre actual, luego no seria ninguna especie del grupo de los simios. Este autor afirma que los seres humanos se desarrollaron en Asia Central, un fueron arborícolas y existieron en periodos anteriores a la Era Terciaria. Los coántropos u “Hombres de la aurora” serían según este autor los antepasados terciarios del hombre.

La teoría antrogenética de la evolución fue desarrollada por el antropólogo Franz Weidenreich. A través de esta teoría, este autor intenta demostrar que los cambios en la organización corporal de los seres vivos son de carácter espontáneo y que ocurren merced a una tendencia interna a desarrollarse.

La teoría organicista de Vandel (1960) considera la evolución en su conjunto como una serie de eslabones o niveles de integración cada vez más complejos. En cada uno de elloos se encuetran los mismos elementos que en el nivel anterior pero especializados y muy integrados en un conjunto dotado de nuevas cualidades.

Finalmente, también, desde el campo de la Antropología hay que destacar el planteamiento Monogenista (un solo origen del que se habría desesncadenado todo el proceso de la evolución) y el Poligenista (que considera que la evolución tiene varios centros originarios)

2 FACTORES DE HOMINIZACION Y PROCESO DE EXTINCIÓN DE LOS ANTROPOIDES FÓSILES

La gran familia de los pongidos, en la que están incluidos todos los grandes antropoides del Mioceno y Plioceno y todos los antepasados de los homínidos, sería en rigor, la única referencia acertada del origen indudable del hombre.

El proceso de hominización es definido por algunos autores como el proceso de acumulación de rasgos análogos en algunos de los grandes antropoides del terciario superior. Esta hominización si se aplica a la etapa pre-humana de la antropogénesis, sucedió en el proceso de evolución de muchas especies de antropoides ortógrados fósiles del Plioceno y Pleistoceno ante la disminución de la superficie boscosa y la aparición de áreas mas o menos llanas o rocosas. Esto es testimonio de que la marcha bípeda sirvió como factor primario fundamental del desarrollo progresivo en los primeros eslabones de la hominización en algunos antropoides del Mioceno-Plioceno. Todo este proceso, incluyendo el que paralelamente tuvo lugar en las funciones nerviosas superiores y en la corteza cerebral de los antepasados del hombre, fue de una gran complejidad y variabilidad.

La diferenciación ulterior de los pongidos se daría en razón de las tres vías principales de que disponían para la conquista del medio:

Modo de vida arborice: Driopitecos y procónsules.

Modo de vida arboreo-terrestre: Oreopitecos

Modo de vida terrestre: antepasados de los australopitecos y homínidos.

El principal factor responsable del fenómeno ortógrado fue la lucha contra los nuevos enemigos, que no existían en el medio arborice. Estos fueron los grandes animales terrestres y voladores carnívoros. La posición erguida, permite una postura en que la cabeza esta mas alta, y ello, unido a la visión binocular y cromatica y el uso instintivo de piedras y palos, supondría ventajas en las acciones defensivas y ofensivas emprendidas contra estos grandes depredadores. Por otro lado, el cambio del modo de vida arborico al terrestre, debió suponer un cambio profundo de instintos: Frente al individualismo como modo de vida, se hizo necesaria la agrupación o gregarismo en pro de la supervivencia en la vida cotidiana, a fin de alimentarse (caza, pesca y recolección) y defenderse.

Las diferentes especies de antropoides bípedos altamente desarrollados (como los australopitecus) perecieron taide o temprano por falta de comida, multiplicación lenta, ataques de carnívoros, carácter biológico inerme…ctr. Solo esta especie -los australopitecus- supo, en el limite de la extinción , salir del ambiente biológicamente desfavorable. Esta “salida” no se hizo a través de un movimiento espacial , sino evolutivo, y en relación con este cambio los australopitecos comenzaron a emplear primero y a fabricar después, utensilios y herramientas de forma regular, para sobreponerse a las limitaciones de su entorno. Fue suficiente con que este paso fuese dado tan solo por algunas manadas de esta especie, para que posteriormente se consolidase el proceso de cambio en estos antepasados directos de los hombres primigenios de la tierra.

3 DATOS PALEOANTROPOLOGICOS SOBRE LA FORMACIÓN HUMANA

Según este tipo de datos, para unos la antigüedad del hombre se remonta a unos cuatro millones de años, siendo los australopitecos (África del Sur y Oriental) los seres mas primitivos que disponen de algunas características humanas. Otros autores sólo reconocer como humanos los restos del género homo, siendo los más antiguos de 2, 5 millones (Orno, Etiopía)

Por lo que hasta ahora se conoce, la evolución no se realiza en línea directa. No hay sucesión directa entre el homo habilis, el erectus , el neanderthal y el cromagnon, y sin embargo, cada uno de estos tipos evolutivos representan un paso mas en la conquista del pensamiento, porque la evolución física correrá paralela a la evolución espiritual, y ello se traduce en una evolución técnica y social.

El hombre actual se caracterizaría por poseer inteligencia consciente, el bipedismo, mantener erguido el tronco, poseer el agujero occipital (foramen mágnum) en posición horizontal, tener las extremidades superiores liberadas y el pulgar oponible a los demás dedos (mano prensil), además de un dentición reducida, baja y cubierta con una capa de esmalte. Por último posee la capacidad de elaborar utensilios.

Los zoólogos clasifican al hombre dentro de la clase de los Mammalia o mamíferos, subclase Theria, infraclase Eutheria, orden de los Primates, suborden Anthropoidea, superfamilia Hominoidea, Familia Hominidae, subfamila Homininae, género Homo y especie Homo sapiens. Los primeros restos fósiles de los hombres actuales fueron hallados en Singa (Sudán) en 1924. Su antigüedad ronda los 150.000 años. Desde que Cari Linneo clasificó taxonómicamente en 1756 a la especie humana como Homo sapiens han existido una gran variedad de modelos explicativos de la evolución. El desarrollo de las investigaciones y los nuevos descubrimientos de registros fósiles provocó un gran número de teorías con desigual éxito y vigencia en el tiempo. Nos referiremos sólo a las más importantes elaboradas en la 2a mitad del XX, entre las que destacan la de Le Cross Clark en 1959, la de Tobías de 1965 (“árbol de Tobías”), la de Leakey enb 1967 (Procónsul de Koobi-Fora, del que partirían tres líneas evolutivas independientes: Australopitecus, Homo Hábiles y Homo Erectus; del Hábilis resultaría el Homo Sapiens, del Erectus el Neandertalensis), la de Loring Brace de 1971, la de Naiper, la de Campbel (1972), la de Johanson, la del checo Jelínek en 1977, la de Olson en 1981, o la más reciente de Arsuaga y Martínez (1998). Seguiremos a estos autores en el desarrollo realizado, ya que su modelo de evolución es muy novedoso, bastante completo y está realizado por autores españoles a luz de descubrimientos realizados en nuestra geografía. Sin embargo, hemos de reconocer la fuerte polémica suscitada en la comunidad científica internacional.

Los mamíferos más antiguos tienen unos 500 millones de años, los placentarios aparecieron hace unos 100 millones de años. El primate más antiguo es el Purgatorius de Montana (USA) con 70 millones de años. De los primates derivan los Prosimios y simios (anthropoideos). Los simios más antiguos tienen unos 40 millones de años. Se dividen en Platirrinos (Nuevo Mundo) y Catirrinos (Viejo Mundo). Estos últimos son los que nos conducen al hombre. Entre ellos podemos destacar el Parapithecus (El Fayum, Egipto) con 35-40 millones de años, el Aegiptopithecus, ya con 32 piezas dentarias y 30 millones de años, y el Afropithecus y Kenyapithecus (Kenya) con 18 millones de años. Según parece llegamos así al primer estadio humano.

3.1 EL PRIMER ESTADIO HUMANO

Por tanto, los primeros hominoideos solo se han encontrado en África. Se definen como indiferenciados, es decir, sin ningún rasgo característico ni de los simios, ni de los hombres actuales. Pertenecen al género procónsul. Mas adelante se encontraron ciertas especializaciones en un hominoide posterior bautizado con el nombre de Kenyapithecus (de aspecto mas parecido a los simios actuales). En parte, este individuo puede ser considerado como una combinación de los grandes simios y de los hombres, pero no puede enlazarse directamente con ninguno de los hominoideos actuales. En este momento, el simio y el hombre todavía no habían separado sus caminos evolutivos.

Fuera de África, los fósiles mas antiguos identificados como hominoideos tienen entre once y trece millones de antigüedad, por la zona de los Balcanes, Anatolia y Pakistán y son el Ramapithecus, Sivapithecus, Gigantopithecus y Oropithecus (12-14 millones de años). Comparten algunas características del Kenyapithecus, así como también otros rasgos particulares que indican una relación exclusiva con los actuales simios, como el orangután, sin conexión alguna con los humanos. Esto es precisamente la evidencia que indica que el orangután fue el primero que se independizó de la agrupación general de los hominoideos y ello ocurrió con anterioridad a la separación entre el simio y el hombre africano. La separación entre chimpancés y humanos se sitúo durante mucho tiempo en torno a los 7 millones de años, considerándose en la actualidad una cronología más cercana (5-4,5 millones).

sea, que el antepasado común de chimpancés, gorilas y humanos debió de vivir en zonas de bosque claro o sabana arbolada en el Trópico africano. Sus características serian: tipo primate activo de tamaño medio, con un modo de vida mixto arbol-suelo, locomoción a cuatro patas, cubierto de pelo y sin cola, mirada fija y mandíbulas fuertes.

La posibilidad de encontrar fósiles de este primate es bastante pequeña, ya que debía de ser escaso y pervivió poco tiempo (¿mandíbula de Lothagam, Kenya, 5,6 millones?) Con un gran vació explicativo entre lo que hemos dicho, y lo que diremos a continuación, si que se puede afirmar que hace unos cuatro millones de años las características que diferencian a simios de humanos (pies y caderas) ya se hablan desarrollado en África en la especie llamada australopiteco.

3.2 LOS PRIMEROS HOMINOIDEOS DE ÁFRICA

Esa demostrado que la postura erguida -factor determinante de la evolución humana- ya se había desarrollado en el yacimiento de Laetolil situado en Tanzania septentrional, hace cuatro millones de años. Huellas de pie, restos de dientes y huesos fosilizados, pero sobre todo el esqueleto casi completo de un individuo, bautizado como Lucy, hallado en el yacimiento de Hadar (Etiopia) confirman esto. Lucy muestra características humanas y características especificas simiescas y ello le sitúa dentro del grupo de los hominoideos (subfamilia Homininae) conocidos corno australopitecus (“monos del sur”). Esta especie existió en África hace entre 4 y 1,7 millones de años. Según el esquema de Arsuaga y Martínez, el australopitecus deriva del Ardipithecus ramidus, que sería el antecesor de los homínidos, con una antigüedad de unos 4,5 millones de años. Este constituiría el fósil más antiguo encontrado de los homínidos. Fue descubierto por White, Sawa y Asfaw en el valle del rio Awash en la región etiope de Afar en 1992. Del ARD. Ramidus se derivaría el Australopithecus bahrelghazali (4,2 millones) del que procedería el australopithecus afarensis (3,7 millones) por un lado y el australopithecus anamensis (4,2 millones) por otro. Del AUST. Afarensis partiría el australopithecus africanus (3 millones), para algunos el antepasado directo del género homo, y el australopithecus aethiopicus (2,6 milones), del que proceden el australopithecus boisei (2,4-1 millones) y el autrolopithecus robustus (1,8-1,4 millones). Algunos autores sustituyeron el nombre a estos tres últimos, y en vez de austropithecus los denominaron Paranthopus (“Cercano al hombre”)

Ya hemos señalado que algunos autores hacen derivar al género Homo del africanus, otros del afarensis, Arsuaga y Martínez, hablan de una especie indeterminada de unos 4 millones de año entre el anamensis y el africanus y el primer homo (2,5 millones). De este primer homo derivaría el Homo rudolfensis (2,5-1,8 millones, con cerebro pequeño cercano al australopithecus y mandíbulas desarrollada) y el homo habilis (2,1-1,5 millones, con mandíbula como el paranthopus pero con cavidad craneana mayor). Wood considera también entre los fósiles más antiguos al homo ergaster (1,8-1 millón) y Arsuaga y Martínez no distingue entre rudolfensis y habilis. Nos situamos, pues, ya en una antigüedad de un millón de años.

Entre las características del género australopithecus habría que destacar que por lo general era de estatura pequeña y capacidad craneana reducida (450-550 cm3), presentaba ya el foramen mágnum horizontal y un arco supraorbital muy marcado, amplio prognatismo, mandíbula grande, aunque los incisivos y caninos eran pequeños, y mentón ausente. Los paranthropus presenta un imponente y especializado aparato

masticador con un gruesa capa de esmalte, menor prognatismoy maxilar más atrasado que el resto de australopithecus. Los principales hallazgos se realizaron en el lago Turkana (Kenya, M. Leakey en 1995, aust. Anamensis), Hadar y Laetoli (Etiopía y Tanzani, 1978, Johanson, White y Coppens, aust. Afarensis) Sterfontein (Sudáfrica, aust. Africanus), Oldovai (Tanzania, 1959, Leakey, aust. Boisei) Orno (Etiopía, 1967 Arambourg y Coppens, aust. Robustus) y Bahr el Ghazad (Chad, 1995, Brunet, Aust. Bahrelghazali)

El “humano del lago Rodolfo”, antiguo nombre colonial que recibía el labo Turkana, tenía una estatura de 1,55 metros y una capacidad craneal de hasta 800 centímetros cúbicos. La estructura de su cráneo es un auténtico rompecabezas donde se combinan rasgos primitivos y modernos. Comparte ciertas similitudes con la caja craneal del habilis y con las del ergaster y erectus, especies más modernas. Este singular homínido fabricaba herramientas de pieda muy toscas y seguía una diera mixta, como revela el estudio de su dentadura. Sus restos fueron encontrados en los ochenta por el equipo del paleontólogo Richard Leakey, en Koobi Fora, cerca del lago Turkana. La industria lírica más antigua se descubrió posteriormente en Orno (Etiopía, 3 millones de años). Posiblemente del homo rudolfensis procedería la línea evolutiva del homo ergaster y homo erectus

El homo habilis era un humano de poca estatura y muy ligero, pues no superaba los 40 kilos. Su mandíbula sufrió una importante reducción pero los restos fósiles del cráneo demuestran que la zona frontal de la cabeza ganó en anchura. Por consiguiente, el área cerebral ubicada detrás, es decir el neocórtex- lugar donde reside la inteligencia, se hizo más espaciosas. La primera mandíbula del “hombre habilidoso” fue encontrada por Jonathan Leakey en Olduvai (Tanzania) en 1964. El análisis de cráneos, caderas y piernas de estos individuos muestran unas pronunciadas diferencias en relación con los australopithecos. A pesar de que el australophiteco probablemente fuese un bípedo mucho mas eficaz que el homo habilis, las adaptaciones vistas en la pelvis del homo habilis fueron esenciales para permitir el nacimiento de niños con un cerebro mas grande. No cabe duda de que los representantes mas tempranos del tipo Homo, muestran una tendencia progresiva a las caracterizaciones anatómicas modernas.

El homo ergaster tiene una capacidad craneana mayor (800-900 cm3), toro supraorbital independizado, huesos nasales, nariz prominente y molares reducidos. Presenta una estatura mayor (1,8 metros) y sus restos fueron encontrados por Leakey en Koobi Fora y Lago Turkana y también en Swartkrans (Sudáfrica) en los mimos niveles que el Paranthropus Robustus.

3.3 LOS PRIMEROS HOMÍNIDOS EN ASIA ORIENTAL

Los primeros homínidos evolucionaron en África y no comenzaron a extenderse por el resto del mundo hasta hace unos 1,7 millones de años a. C. con la especie homo erectus. Según Arsuaga y Martínez es una derivación del Homo Ergaster que desaparecería hace poco más de 100.000 años. Son los protagonistas de la primera salida de África y llegaron hasta Oriente Medio, Asia y Europa adaptándose a muy diferentes habitáis.

El mas antiguo de los erectus extraafricanos se encontró en el yacimiento de Yuangmou en China occidental con una antigüedad de unos 1,7 millones de años a. C.. Algo mas moderno es el yacimiento de Sangiran en Java (1,3 millones de años a. C.). Fue en esa isla indonesia donde Dubois llevó a cabo las excavaciones de Trinil, Modjokerto y Sangiran descubriendo en 1891 el Pithecanthopus Erectus (“Hombre-mono erguido), con una capacidad craneana cercana al millar de centímentros cúbicos. Algunos erectus están asociados a utensilios de piedra y a la utilización del fuego. Mas moderno es el yacimiento mas famoso de la zona situado en una cueva de China y llamado Zhou-Kou-dian, con once capas arqueológicas que abarcan el periodo entre 450.000 y 350.000 años atrás.

En la zona tropical se han encontrado yacimientos de 600.000 años de antigüedad en Tailandia, Vietnam y el norte de Corea con poblaciones de Homo erectus. Pero ¿deriva el hombre moderno de esta especie que protagonizó la primera gran expansión homínida? La mayor parte de los investigadores opinan hoy que no.

3.4 HACIA EL HOMBRE MODERNO

Siguiendo el esquema de Arsuaga y Martínez (1998) el hombre moderno deriva del homo antecessor que convivió hace un millón de años con la línea evolutiva del homo ergaster y homo erectus. Procedería directamente del hombre primitivo del que derivaría el habilis y el rudolfensis, aunque también podría directamente del ergaster. Del homo antecessor surgirían dos líneas, por un lado el homo heidelbergensis (700-280.000 años) del que derivaría el homo sapiens neanderthalensis (200-35.000 años), y por otro lado, la segunda línea nos llevaría al hombre sabio arcaico (350.000 años) de la que surgiría hace unos 35.000 años el homo sapiens sapiens o hombre sabio moderno. El homo Antecessor fue descubierto en 1997 en Atapuerca por Arsuaga, Bermúdez de Castro y Carbonell, menos robusto que el ergaster, presenta, sin embargo, rasgos primitivos en la dentición y una capacidad craneana que en torno a 1000 cm3. La tesis del antecessor contradice el esquema anterior de Stringer (“En busca de los Neandertales”, Barcelona, 1996) que agrupaba a todos los anteriores a los neandertales dentro del heidelbergensis. Ha suscitado, pues, una viva polémica que ha situado la investigación española en el ojo del huracán. A los descubrimientos de Atapuerca había que unir los más polémicos de Orce (Granada), cuyos defensores (Gisbert) quieren hacerlos pasar por Homo Ergaster, y por tanto, en una línea evolutiva anterior a la del Homo Antecessor.

Las últimas investigaciones vuelven a situar en África el origen del homo moderno. El equipo de científicos que descubrió el homo antecessor considera que es descendiente de los homo antiguos de África y la raíz de la que surgieron las poblaciones posteriores. Llegaron de África hace poco más de 1 millón de años, en pleno Paleolítico Inferior. La fecha exacta en que Europa fue poblada se desconoce. Los poblaciones homínidas europeas anteriores al millón de años de antigüedad son escasas, en cambio a partir de fechas posteriores comienzan a ser abundantes e inequívocas por toda Europa. Estos primeros habitantes pudieron ser miembros del grupo homo ergaster pues presentan características relacionadas con ellos, pero esta afirmación conlleva un alto grado de incertidumbre. Parece ser que estos grupos vivían de la caza y de la recolección, tallaban útiles de piedra y madera. La mayoría de estos yacimientos están a orillas de ríos y lagos. Entre el 700.000-400.000 años atrás se fabricaron y usaron las primeras hachas de mano en Europa (periodo achelense catalogado en el yacimiento de Saint Acheul). En la época del ultimo intergiaciar hace unos 120.000 años la población europea primitiva empezaba a mostrar algunas de las características físicas que aparecerán con mas fuerza en la fase siguiente: la fase Neanderthal.

3.5 LOS NEANDERTHALES

Aparecieron en Eurasia hace unos 200.000 años y se extinguieron hace unos 35.000. El homo sapiens neanderthalensis (“hombre inteligente del valle del río Neander” recibe su nombre del enclave alemán donde Johann Cari Fuhlrott descubrió varios esqueletos en 1856. Presenta una mezcla de caracteres arcaicos y modernos. Aunque su aspecto era más tosco que el del hombre moderno, su cerebro, de tamaño similar, tiene pocas diferencias respecto al mismo: un poco más largo y aplastado, más grande pero con un índice de encefalización menor. Estos seres humanos, tenían una estatura media de 1,65 metros, estaban sólidamente constituidos: la fuerza de sus miembros era bastante grande. Al parecer fueron los primeros en enterrar a sus muertos, cuidar a los enfermos, poseían rituales, manifiestan un cierto sentido estético y una determinada organización social. Los nenderthales son conocidos como los fabricantes de utensilios de piedra musteriense (utensilios realizados a base de lascas). Se venia pensando que las diferencias entre las distintas industrias líticas del Paleolítico medio y el superior se basaban en diferencias de capacidad intelectual entre sus fabricantes, siendo los primeros (P. Medio) propios de los nenderthales y los segundos (P. Superior) del hombre moderno. En recientes hallazgos (Francia) se han encontrado restos de neanderthales asociados a las industrias del P. Superior. Ello muestra que durante un tiempo convivieron con el homo sapiens sapiens y que los motivos de su rápida extinción no están claros.

3.6 LOS PRIMEROS HUMANOS MODERNOS. EL HOMO SAPIENS SAPIENS

La aparición de los primeros humanos anatómicamente modernos-homo sapiens sapiens- tuvo lugar en África. Son más altos, con las extremidades más largas y más gráciles. Presentan el cráneo redondeado entre 1350 y 2000 cm3 pero con el mayor índice de encefalización, la frente vertical, ausencia de prognatismo, nariz pequeña y mandíbula con mentón. Su peso se sitúa entre 65 y 75 kg y la altura media alcanza 1,7 metros. Según unos autores apareció en África hace unos 300.000 años y se expandió posteriormente. Otros consideran que es la evolución de la primera emigración hace un millón de años y que habrían evolucionado de diferente modo y paralelamente (Origen Multirregional o poligenismo). En este momento se han encontrado los primeros utensilios compuestos de piedra y otros materiales y ello representa un avance importante en la tecnología humana. Esta época —el Paleolítico Medio africano- nos proporciona también las primeras pruebas del avance de la capacidad humana hacia el pensamiento abstracto a través de las obras artísticas y de ornamentación. En los últimos tiempos se han desarrollado estudios moleculares a través del ADN de las mitocondrias y del cromosoma Y (Cann, Stoneking, Wilson…) que parecen confirmar la hipótesis de la “Eva Negra” frente a la poligenista del “candelabro” y confirmar el origen del hombre moderno hace unos 200.000 años y la salida de África hace unos 100.000, con la ocupación de Asia, Europa (40.000) y América y Oceanía (30.000). Los primeros humanos modernos de Asia oriental son una forma primitiva de homo sapiens y también han sido hallados en los yacimientos de China y de Java en niveles de antigüedad de hace unos 120.000 a. C. Y hace unos 30.000 años los habitantes de la cueva superior de Zhoukoudian ya eran físicamente idénticos a nosotros. Otros restos con la misma antigüedad aproximada están en Borneo, Java y Filipinas. El ultimo periodo Paleolítico, el superior (hace unos 35.000-12.000 años) se asocia con la aparición en Europa de estos humanos desarrollados hace más de 100.000 años solo en África, y que desplazaron o sustituyeron al homo neanderthal.

4 CULTURAS MATERIALES DURANTE EL PALEOLÍTICO

Utilizamos el esquema realizado por CANO HERRERA, M.: “Prehistoria” en Historia Universal, tomo I, Ed. Nájera, Madrid, 1987.

Paleolítico Inferior

Industrias arcaicas: Pebble Culture, Cultura Olduvaiense

Cultura Abbevillense

Cultura Achelense: En Europa se distinguen: Clactoniense, Tayaciense, Evanosiense, Pre-Musteriense

Paleolítico Medio

Cultura Musteriense

Facies Charentiense

Musteriense Típico

Musteriense de tradición achelense

Musteriense de denticulado

Paleolítico Superior

Cultura Perigordiense (Perigordiense Inferior)

Cultura Auriñaciense

Perigordiense Superior

Auriñaciense I

Auriñaciense Evolucionado

Auriñaciense Final

Cultura Solutrense (proto-solutrense, inferior, medio, superior)

Cultura Magdaleniense (Inferior, Medio, Superior y Final) Cultura Aziliense

5 LA APORTACIÓN DE LA ANTROPOLOGÍA HISTÓRICA

Aunque el objeto de la antropología es el hombre, el estudio que esta ciencia hace de él se realiza a través de sus particulares puntos de vista. En el pasado fueron cuatro los principales enfoques teóricos:

El evolucionismo

El historieismo

El funcionalismo

El configuracionismo

En la actualidad, la obra de los antropólogos abarca y depura todos estos enfoques del pasado, combinando elementos teóricos de las cuatro escuelas y elaborando continuamente técnicas de investigación mas sofisticadas.

5.1. EL PROCESO DE HOMINIZACIÓN A TRAVÉS DE LA VISIÓN ANTROPOLÓGICA

Una gran aportación de la Antropología ha sido el desmentir, gracias a la gran acumulación de datos recopilados desde los años setenta por parte de los antropólogos físicos, la teoría de que las diferencias entre los humanos y el resto de los animales son consecuencia de su mayor tamaño cerebral, y de que, cuando el cerebro evoluciono lo suficiente permitió hablar, crear herramientas, normas de comportamiento…etc a sus tenedores (los humanos). Esta teoría dice también que en el momento en que el cerebro del tamaño llego a su tamaño ideal cesó la adaptación biológica, para proseguir la evolución a través de una adaptación cultural. Como decíamos al principio, los antropólogos han podido demostrar que esto no fue así. Han demostrado que la capacidad cultural del hombre ha evolucionado gradualmente y no mediante una transformación repentina. En el caso del australopitheco la evolución cultural estaba ocurriendo de manera concomitante a la evolución biológica.

Hoy día sabemos que la postura erecta y el uso de herramientas a que ella da lugar, fue algo que ocurrió anteriormente al desarrollo del cerebro. El australophiteco desarrollo una forma elemental de cultura aún cuando su cerebro fue apenas mayor que el de un gorila. Las previsiones y la destreza manual se convirtieron en importantes componentes de adaptación.

6 BIBLIOGRAFÍA

J.L. Arsuaga y I. Martínez: La especie elegida. La larga marcha de la evolución

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