Tema 64 – La generación del 14, o el novecentismo.

Tema 64 – La generación del 14, o el novecentismo.

1.- Introducción.

En 1917 España sufre una serie de conflictos sociales: frente a la vieja oligarquía de partidos empieza a surgir una pequeña burguesía reformista y las clases obreras van cobrando conciencia de sí mismas. Tras la Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930), esos grupos son los que forman la segunda República en 1931.

En este mismo periodo en el campo de la Literatura se va sucediendo el relevo a los noventayochistas y modernistas. Tal relevo lo llevan a cabo el Novecentismo, los diversos movimientos vanguardistas y la Generación del 27. estos tres movimientos se suceden y se superponen en una misma época.

2.- La denominación de Novecentismo.

No puede decirse que los escritores que vamos a ver formaran exactamente un grupo. Sin embargo, todos ellos nacieron en la década de los 80, y empiezan a tomar forma de grupo en torno a 1914 más o menos. Eugenio D´Ors, uno de los adalides veteranos de este movimiento usó, en catalán, el término Noucentisme para referirse a aquellas tendencias que se separaban por completo de las del siglo XIX. Como dirá otro de sus protagonistas, Ortega y Gasset, hay generación si un grupo de personas tiene los mismos propósitos y los mismos criterios.

Se gestaría en la primera década del siglo, alcanzaría su madurez en 1914, conviviría con la Vanguardias de los años 20 e iniciaría su ocaso ideológico y estético con la politización de la literatura a partir de 1930.

6.- La novela novecentista.

Es común a todos ellos una superación en las maneras de contar las cosas, pero se distinguen en cómo rompen con lo anterior: por el lirismo, la ironía, el humor, el intelectualismo, la deshumanización,…

6.1.- Wenceslao Fernández Flores.-  Es el gran maestro de la novela humorística. Irónico y a veces sentimental analiza seres típicos españoles y es escéptico con los tradicionalistas, como en Volvoreta (1917), Barba Azul (1923) o El bosque animado (1943).

6.2.- Benjamín Jarnés.- La acción de sus novelas se reduce al mínimo: predominan las reflexiones y descripciones líricas de los protagonistas, como en Locura y muerte de nadie (1929).

6.3.- Gabriel Miró.- escritor alicantino (1879-1930), escribió veintidós libros, de los que la mayoría son narraciones cortas, y el resto, novelas y libros de impresiones y descripciones de tierras y gentes.

Su estilo es extremadamente sensorial: capta continuamente luces, matices, aromas, sonidos,… Todo ello desde un punto de vista lírico, casi poemático, con un lenguaje pulcro y selecto que aproxima sus novelas al poema en prosa, quedando por ello la acción relegada a un segundo plano.

Sus argumentos se sitúan en Oleza -trasunto de Orihuela- y muchas las protagomniza Sigüenza –alter ego de él mismo-, como en El libro de Sigüenza (1917), Años y leguas (1928) o El obispo leproso (1921), donde critica la intolerancia y el atraso cruel del momento.

6.4.- Ramón Pérez de Ayala .-  Nació en Oviedo en 1880, fue embajador en Londres con la República y por ello se exilió en Buenos Aires. Regresó a Madrid en 1955, donde murió en 1962. Fue el máximo exponente de la novela intelectual que promulgaba Ortega  y Gasset. Introdujo numerosas novedades formales. Andrés Amorós ha dividido su obra en tres etapas:

Entre 1907 y 1913 publica obras con su alter ego Alberto Díaz de Guzmán, destacando Troteras y danzaderas (1913) donde critica la vida bohemia de Madrid.

En 1916 lanza la trilogía Novelas poemáticas de la vida española compuesta de Prometeo, Luz de domingo y La caída de los limones, en ellas desaparece lo autobiográfico y la acción mientras que ganan terreno las reflexiones y los pasajes poemáticos.

En 1921 inicia su última etapa, Novelas de temas universales, en ellas los personajes encarnan ideas y actitudes vitales; por ejemplo en Belarmino y Apolonio (1921), donde uno es meditativo y el otro sumamente vitalista, o en El curandero de su honra (1926) sobre el amor y el honor. En todas sus etapas él lucha por la perfección de unas palabras que expresen exactamente su paradójico y complejo pensamiento.

6.5.- Ramón Gómez de la Serna.- Fue el pionero y maestro de las vanguardias españolas. Su obra es una continua ruptura con todas las reglas. La vida es un circo, que sólo se puede describir con un humor un poco amargo. Su obra está  llena de greguerías, en la que, brevemente se hacen asociaciones insólitas. Él las definía como humorismo + metáfora = gregería  -por ejemplo, la morcilla es un chorizo lúgubre-. Escribió multitud de cuentos y algunas novelas en las que se desinteresa por el argumento y los sustituye por escenas yuxtapuestas, cuadros y divagaciones, como en El torero Caracho (1927) donde distorsiona la fiesta nacional.

2. LA NOVELA ESPAÑOLA ANTERIOR A 1936

1. LA GENERACIÓN DEL 98
.Noventayochistas y modernistas constituyen una misma generación histórica y entre ellos hay numerosos puntos comunes.

LA MADUREZ DEL 98. ACTITUDES, IDEAS Y TEMAS
.Idealismo, con los siguientes rasgos:
1.- Se intensifica el entronque con las corrientes irracionalistas europeas: Schopenhauer, Kierkegaard…
-Puede hablarse de neorromanticismo.
2.- Preocupaciones existenciales y religiosas.
-Sobre todo Unamuno.
3.-El tema de España, enfocado con tintes subjetivos.

NÓMINA DEL 98.
.Baroja, Azorín y Maeztu (“Los Tres”).
.También Unamuno.
.Es discutible incluir a Machado y Valle.

SIGNIFICACIÓN LITERARIA DEL 98. ESTILO
.Contribuyeron mucho a la renovación literaria de principios de siglo.
-Repudiaron la retórica y el prosaísmo de la generación anterior.
-Excepciones: Azorín valoró a Galdós, Bécquer y Rosalía.
.Larra fue considerado un precursor.
.Admiran a los clásicos:
-Cervantes sobre todo.
-Fray Luis.
-Quevedo.
>Fervor por la literatura medieval:
-Poema del Cid.
-Gonzalo de Berceo.
-Jorge Manrique.
.De aquí salen las novedades estilísticas.
-Voluntad de ir a las ideas, al fondo.
-Sentido de la sobriedad:
a) Reacción contra la retórica decimonónica.
b) Exigente cuidado del estilo.
-Gusto por las palabras tradicionales y terruñeras.
>Ampliaron el caudal léxico.
-Subjetivismo:
a) Lirismo que desvela el sentir personal de los autores.
b) Realidad y sensibilidad llegan a fundirse íntimamente.
.Innovaciones en los géneros literarios:
-Se configura el ensayo moderno, muy flexible:
a) Pensamiento.
b) Reflexiones culturales.
c) Visión lírica del paisaje.
-Profundas novedades en la novela.
-Los intentos renovadores en el teatro tuvieron menor éxito.
.La renovación de los noventayochistas es considerada la Edad de Plata de nuestra literatura.

MIGUEL DE UNAMUNO

VIDA Y PERSONALIDAD
.Nació en Bilbao en 1864.
.Guerra carlista en su infancia.
.Estudió Filosofía y Letras en Madrid.
-A los 20 años se doctoró con una tesis sobre la lengua vasca.
-Al tercer intento logró la cátedra de Griego en Salamanca.
-De esta universidad sería elegido rector en 1901.
.Por su oposición a Primo de Rivera, fue desterrado (Fuerteventura y Francia) entre 1924 y 1930.
.Fue diputado durante la República.
-Actitud cambiante ante el levantamiento del 36.
-Postura definitiva ante Franco: “Venceréis pero no convenceréis”.
-Esto le valió ser confinado en su domicilio, donde murió al final de 1936.

.Personalidad fortísima y desgarrada.
-Vivió en perpetua lucha consigo mismo, sin encontrar nunca la paz.
-También en lucha con los demás, contra la trivialidad de su tiempo.
-Esfuerzo por sacudir las conciencias.
.Evolución ideológica:
-Pierde la fe tras varias crisis juveniles.
-Se afilia al PSOE.
-Tras una crisis de 1897 abandona la política activa.
-Vuelve los ojos a los problemas existenciales y espirituales.
-Pero también le preocupó España.

LA OBRA. LOS GRANDES TEMAS
.Cultivó todos los géneros.
.2 grandes ejes temáticos:
a) El problema de España, la idea de la “intrahistoria”.
-En torno al casticismo.
-Por tierras de Portugal y España.
b) El sentido de la vida humana.
-Vida de don Quijote y Sancho.

PENSAMIENTO Y SENTIMIENTO TRÁGICO DE LA VIDA DE UNAMUNO
.No es un pensador sistemático:
-Sus reflexiones se esparcen en ensayos, poemas, novelas…
-Esto se debe a su orientación filosófica.
-Vitalismo influido por Kierkegaard. Es un pensamiento vivo.
.Del sentimiento trágico de la vida (1913)
-Arranca del “hombre de carne y hueso” y sus anhelos.
-Ansias contradictorias:
a) Escoger una posibilidad y ahondar en ella.
b) Volcarse hacia todas las posibilidades.
.Amenaza de la Nada.
-Angustia por saber que se va a morir.
-La inmortalidad es la gran cuestión de la que depende el sentido de nuestra existencia.
-Hambre de Dios: necesita un Dios que garantice la inmortalidad.
-Pero la razón le niega la esperanza, aunque su corazón la tenga desesperadamente.
.La agonía del Cristianismo (1925).
-Su cristianismo era cercano al protestantismo.
-Amaba apasionadamente a Cristo.
-Tenía un anhelo de querer creer.

NOVELAS Y “NIVOLAS”
.Intrahistoria: vida de unos hombres y de unos pueblos que cumplen con sus obligaciones y deberes pero en el anonimato, como sujeto colectivo.
-Toda la novela San Manuel bueno, mártir es intrahistoria.
Paz en la guerra: sobre la guerra carlista. Esta novela le llevó 12 años.
.Después pasa a escribir con más rapidez.
.Amor y pedagogía.
-Un hombre quiere educar a su hijo para hacer de él un genio.
-Pero el hijo será desgraciado y angustiado y acabará suicidándose.
.Niebla (1914)
-Es su obra maestra en el género.
-Con actitud desafiante, la subtitularía “nivola”.
.Sentimiento trágico de la vida.
-Los protagonistas son agonistas, de confusión y misterio.
-Un protagonista individual plantea problemas existenciales.
-Los personajes de ficción influyen en el autor.
.Otras obras:
-Abel Sánchez: sobre el odio y la envidia.
-La tía Tula: sobre el sentimiento de maternidad.
-Tres novelas ejemplares.
.Novedades técnicas:
-Soltura constructiva.
-Muy pocas descripciones: su relato se centra en las almas > muchos diálogos.
-No importa la acción.
-Novelas abiertas al lector.
-Exclamaciones, interrogaciones, puntos suspensivos, frases entrecortadas.

EL ESTILO DE UNAMUNO
.Su estilo es “el hombre”.
-Estilo despegado de viejas retóricas, aunque con su “retórica” personal.
-Quiere un estilo desnudo, frente a los estilistas que lo visten de galas.
.Busca la densidad de ideas, la intensidad emotiva.
-Lucha con el idioma, para adaptarlo a su pensamiento.
.Contradicciones internas.
-Gusto por las paradojas y las antítesis.
-Horror a la rutina: da nuevos sentidos a las palabras o revitaliza las antiguas.
-Busca, como Azorín, palabras rústicas y terruñeras.

1c) AZORÍN

VIDA Y PERSONALIDAD
.Su nombre: José Martínez Ruiz.
-Azorín es el nombre del protagonista de sus primeras novelas.
.Nació en Monóvar, Alicante, en 1873.
.Estudió Derecho, pero se dedicó toda su vida al periodismo.

.Ideas políticas y religiosas:
-Anarquismo en su juventud.
-Conservadurismo en su madurez.
.Obsesión por el tiempo, por la fugacidad de la vida.
-Melancolía que fluye mansamente.
-Espíritu nostálgico que vive para evocar.

OBRA
.Es un ensayista magistral.
.Muchos artículos de crítica literaria.
.Evocaciones de las tierras y los hombres de España.

LAS NOVELAS
.Acercamiento de la novela al ensayo.
-Tiene muchas “novelas” que apenas se distinguen de sus ensayos.
-Pierde importancia el argumento.
.En todo ello aflora su peculiar visión de la vida, su “dolorido sentir”.
.Títulos de carácter autobiográfico:
a) La voluntad (1902).
b) Antonio Azorín (1903).
c) Las confesiones de un pequeño filósofo (1904).
.Revisa ciertos tipos literarios:
a) Don Juan (1922).
b) Doña Inés (1925).
.Presenta nuevos personajes melancólicos.
a) María Fontán (1943).
b) Salvadora de Olbena (1944).

EL ESTILO
.El lenguaje pasa a primer término.
-Su lengua es consustancial con su manera de sentir.
-Estilo que fluye lento, melancólico.
.Están presentes los dos rasgos de la nueva novela:
Voluntad artística.
Subjetivismo.
.Cualidades: precisión y claridad.
-Empleo de la palabra justa y la frase breve.
.Descripciones:
-Técnica miniaturista.
-Atención al detalle de los que sabe extraer hondas sugerencias.
.Inmensa riqueza de vocabulario.
-Búsqueda de las palabras olvidadas propias del grupo del 98.

LA NOVELA DEL 98: PÍO BAROJA

1.- Trayectoria vital.

Nace en San Sebastián en 1872. Llega a Madrid, donde estudia Medicina doctorándose con una tesis sobre El dolor. Ejerce como doctor en Cestona – Guipúzcoa -, pero se decepciona de su labor y acepta el ofrecimiento de regentar una panadería de una tía suya en Madrid. Este trabaja le facilita escribir en diarios y revistas e integrarse en el círculo literario del 98. Desde 1900 hasta 1911 publica lo más importante de su obra y va ganando un reconocimiento que le hace poder vivir de la literatura: viaja por España, Francia, Inglaterra, España e Italia. Se siente un anarquista de pensamiento, no de acción, por su oposición a las estructuras sociales en general, que sólo buscan el beneficio del poder.

No obstante, a partir de esta fecha se va haciendo más sedentario y se dedica exclusivamente a la literatura. Rechaza el anarquismo por ser ésta una ideología que tiene esperanzas en el hombre, algo que él no contempla en absoluto. Antes de la Guerra no se muestra afín a ningún bando por su eterno inconformismo a todo programa ideológico.En 1939, con el estallido de la Guerra Civil tiene un incidente con unos carlistas vascos y huye a Francia, de donde retorna un año más tarde para recluirse en su casa de Madrid, donde muere en 1956.

2.- Los temas de sus novelas: el pesimismo existencial.

Para entender su pensamiento, tenemos que tener en cuenta que la personalidad de Baroja se traslada a sus obras: siempre fue un hombre solitario y absolutamente independiente y sincero: de ahí su fama de individualista intratable. Es enormemente sensible a la crueldad humana, pero también a la ternura de los hombres.

Es precisamente esta sinceridad la que le lleva al escepticismo: le hace poner en entredicho todos los dogmas sociales, literarios o de cualquier tipo: no alberga ningún tipo de esperanza en el hombre ni en la vida, que, por lo demás, es absurda sin remedio porque se rige por leyes naturales, y éstas son siempre irracionales. Todo ello provoca en su alma un cansancio de la vida que hunde sus raíces en Schopenhauer: solo nos puede mantener vivos la acción a favor de alguna idea – independientemente de que triunfe o no – o contemplar recluidos cómo el tiempo se desliza por nosotros.

De hecho, sus protagonistas estarán siempre en desacuerdo con la sociedad, pero expresan su carácter de dos modos bien distintos: de un lado tenemos los irreflexivos y de acción y de otro los paralizados por sus reflexiones: cuanto más se piense la vida menos se actúa sobre ella.

3.- La estructura de sus novelas.

La novela es, en su opinión, un género multiforme donde no solo cabe la narración de historias o hecho sino las digresiones filosóficas, el análisis psicológico de los pensamientos, la reflexión histórica, anécdotas independientes del argumento central,… Por eso sus obras son novelas abiertas y permeables. Llegó incluso afirmar que una novela es posible sin argumento; muchas de sus novelas son abiertas: es decir, no hay un final claro, sino que se deja a los personajes arrojados a la incertidumbre de sus vidas.

Para él, tanto como el devenir de los personajes, es importante la observación de caracteres y costumbres: de hecho sus personajes van evolucionando su pensamiento a medida que avanza la obra, a pesar de que no les hayan sucedido grandes acontecimientos. La acusación de que escribía sin un plan premeditado es falsa: sus novelas responden a una planificación premeditada, como veremos en El árbol de la ciencia.

Sus obras suelen tener una estructura de novela de aprendizaje, o Bildungsroman, los personajes responden, piensan y eligen la vida que les premia o les castiga y, en consecuencia, aprenden a través de su propia experiencia vital.

4.- El estilo de sus novelas.

Igualmente se le ha criticado su estilo despreocupado, pero sucede que su prosa pretende ser clara y absolutamente sincera: abomina del retoricismo y aboga por una claridad trabajada, precisa y ágil. Sus afirmaciones, en efectos, se desarrollan por oraciones y párrafos breves, lo que hace que la lectura de sus novelas sea rápida.

Las descripciones de las cosas responden a la llamada técnica impresionista: por un lado, refleja la impresión subjetiva que le dejan las cosas en el interior del escritor: muchas veces, incluso, los paisajes son reflejos del alma del narrador. Por otro lado, es impresionista porque el autor refleja las cosas sin demasiado detalle: le basta con unos pocos sustantivos y adjetivos para destacar lo esencial de lo descrito.

Su carácter de observador le hace plasmar la viveza de las conversaciones con diálogos vivaces y ágiles y reflejar lugares y costumbres que él selecciona: es decir, sólo trata lo que le interesa. Es una técnica que aparentemente es realista, pero el subjetivismo existe por la selección que hace de la realidad.

5.- Su producción.

Baroja fue un escritor fecundísimo: escribió más de sesenta novelas de las que más de la mitad se agrupan en trilogías, por ejemplo:

Tierra vasca (1900-1909), que trata sobre un hombre de acción, Zalacaín en medio de las Guerras Carlistas.

La lucha por la vida (1904-1905), aborda la vida zarandeada de Manuel en los bajos fondos de Madrid, dentro de una visión regeneracionista muy propia del 98.

El mar (1911-1930), cuyo protagonista es un recio marinero vasco, hombre también de acción, en el sentido que le dimos.

A la raza (1910-1920), en la que se incluye el libro que vamos a estudiar.

En una primera etapa publica una serie de cuentos y novelas de corte modernista, donde ya aparece la Galicia primitiva tan grata al autor, con una mezcla de realidad y leyenda. Su trayectoria culmina con las Sonatas: Sonata de Otoño (1902), Sonata de Estío (1903), Sonata de Primavera (1904) y Sonata de Invierno (1905).            Son la memorias del Marqués de Bradomín – un don Juan feo, católico y sentimental, según el mismo Valle-Inclán-, que se componen de numerosos episodios donde el personaje hace gala de su elegancia decadentista y de su amoralidad antiburguesa. Lo escribe con una prosa modernista: rítmica, cercana a veces al poema, y rica en efectos sensoriales.

3.- La transición hacia los esperpentos.

Se inicia con las Comedias bárbaras: Águila de blasón (1907), Romance de lobos (1908) y Cara de plata (1922). En ellas continúa la línea de la Galicia rural, pero ahora mostrada con personajes extraños, tarados, violentos y tiránicos, como el hidalgo Juan de Montenegro. Siguiendo la línea del esperpento, Valle-Inclán publicó Los cuernos de don Friolera (1921), Las galas del difunto (1921), La hija del capitán (1927) y las piezas breves que conforman el Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte (1924-1927). En la misma estética se sitúan las novelas Tirano Banderas (1926) y la trilogía El ruedo ibérico (1927-1932).