Tema 2 -El desarrollo psicomotor en los niños y niñas hasta los seis años. La psicomotricidad en el currículo de la Educación Infantil. La sensación y percepción como fuente de conocimientos. La organización sensorial y perceptiva. La intervención educativa.

Tema 2 -El desarrollo psicomotor en los niños y niñas hasta los seis años. La psicomotricidad en el currículo de la Educación Infantil. La sensación y percepción como fuente de conocimientos. La organización sensorial y perceptiva. La intervención educativa.

ESQUEMA RESUMEN

0. INTRODUCCIÓN.

1. DESARROLLO PSICOMOTOR EN EL NIÑO/A HASTA LOS 6 AÑOS.

ü Definición desarrollo psicomotor.

ü Fases.

· Esquema corporal.

o Sensibilidad.

o Los desplazamientos.

o Etapas en la estructuración del esquema corporal.

· Lateralidad.

· Coordinación de movimientos.

· Tono muscular.

· Equilibrio.

· Nociones espacio temporales.

· Desplazamientos.

· Respiración y relajación.

2. PSICOMOTRICIDAD EN EL CURRÍCULO DE LA ED. INFANTIL.

ü Objetivos.

ü Contenidos.

ü Metodología.

ü Evaluación.

3. LA SENSACIÓN Y PERCEPCIÓN COMO FUENTE DE CONOCIMIENTO.

4. ORGANIZACIÓN SENSORIAL Y PERCEPTIVA.

4.1. Principios de Gimeno para reconocer e interpretar los estímulos.

ü Percepción visual.

ü Percepción auditiva.

ü Percepción olfativa.

ü Percepción gustativa.

ü Percepción táctil.

4.2. La organización perceptiva en el período de 3 a 6 años.

5. LA INTERVENCIÓN EDUCATIVA.

5.1. Instrumentos de la intervención educativa: actividad corporal, lenguaje.

5.2. Motivación.

5.3. El orden y la organización espacio-temporal en clase.

6. BIBLIOGRAFÍA.

0. INTRODUCCIÓN.

En el siglo XIX la psicomotricidad aparece como una parte de la Educación Física. En el siglo XX ya se habla de ella como tal, aceptando su vertiente psicológica. Aparecen movimientos como la Escuela Nueva que intenta convertir la educación en un campo de experiencias reales. En un principio, el término psicomotricidad se refiere a la terapéutica de las dificultades de la motilidad del niño, para más tarde referirse a la educación integral del individuo.

1. DESARROLLO PSICOMOTOR EN EL NIÑO/A HASTA LOS 6 AÑOS.

El desarrollo psicomotor depende de la maduración neurológica y de la forma como ésta se produce. Pasa por una fase RECEPTIVA; otra DISCRIMINATIVA y una última de ADQUISICIÓN DE CONOCIMIENTOS que se prolongará a lo largo de toda la vida. Veamos este desarrollo a través de la evolución de sus elementos:

ü Esquema corporal: es la representación mental del propio cuerpo, de sus partes, de sus posibilidades de movimiento y de sus limitaciones espaciales (BALLESTEROS). Su adquisición se lleva a cabo por:

· Sensibilidad:

o Exteroceptiva: información exterior a través de impresiones cutáneas, visuales, auditivas, gustativas y olfativas.

o Propioceptivas: información recibida desde los órganos terminales sensitivos situados en los músculos, tendones y articulaciones.

o Interceptiva y visceroperceptiva: impresiones recibidas desde la superficie interna del cuerpo y las vísceras.

· Los desplazamientos:

o Segmentarios: de una parte del cuerpo.

o Globales: de todo el cuerpo en conjunto.

· Etapas:

o Primeros años de vida: delimita su cuerpo de los objetos y va adquiriendo el esquema corporal.

o 4 años: prevalecen los elementos motores y cinestésicos e inicia la lateralización.

o 5 años: prevalecen los elementos motores sobre los perceptivos.

o De 5 a 7 años: los elementos se articulan e integran en el todo. El movimiento se hace reflexivo. El proceso de lateralización proporciona referentes externos estables.

Al final de estas etapas abra adquirido el esquema corporal, la estructuración espacio temporal, el ajuste postural, la habilidad manual y la coordinación motriz general.

ü Lateralidad: se es zurdo o diestro en función de la dominancia lateral, pero hay que considerarla en ojo, mano y pie, y puede ser cruzada. Está asociada a factores emocionales y afectivos, pudiendo producir dificultades en el aprendizaje y conflictos de autoconcepto y personalidad.

ü Coordinación de los movimientos: primero se coordinan los músculos pesados y luego los de los movimientos finos. Desde que anda bien, tiene lograda la base del desarrollo psicomotor.

ü Tono muscular: el tono necesario para realizar un movimiento lo regula el Sistema Nervioso Central y puede ser aprendido y desarrollado porque se controla voluntariamente.

ü Equilibrio: el crecimiento del cerebro facilita el dominio del equilibrio, ya que permite el control de nuestros movimientos y acciones.

ü Nociones espacio-temporales: la noción de espacio es difícil de adquirir y se consigue primero el espacio práctico (en el que se produce la acción) que el figurativo (dibujos, maquetas,…), el espacio corporal (propio cuerpo) que el amplio (todo lo exterior al cuerpo), el espacio habitual que el poco conocido y que el desconocido, el espacio cercano que el lejano. La construcción del tiempo requiere una abstracción; comprenderá primero las nociones temporales ligadas a la satisfacción de sus propias necesidades corporales y poco a poco adquirirá la representación de un tiempo objetivo en el que sitúe cosas y acontecimientos presentes.

ü Desplazamientos: primero hay que superar el movimiento en el plano horizontal; al final del primer año debe de iniciarse la marcha en bipedestación, con pies muy separados; cuando domine el andar querrá dominar la altura, pero no sabe bajarse; luego pasará a la carrera, complicará el andar normal (de puntillas, con un solo pie,..) y por último el salto. Cada etapa se consigue por maduración y aprendizaje.

ü La respiración: respiración y relajación son muy importantes en la expresión corporal. El profesor debe conocer las fases (inspiración, espiración), las vías (internas y externas) y los tipos (torácica y abdominal) para diversificar las actividades, observando a los niños y concienciándoles del control de su respiración. La relajación pretende el control del tono muscular, para ello intervendremos en la discriminación perceptiva del cuerpo en reposo y en movimiento, la velocidad de la musculatura en reposo y en movimiento y la manipulación de objetos con diversos grados de tensión.

2. LA PSICOMOTRICIDAD EN EL CURRÍCULO DE LA EDUCACIÓN INFANTIL.

La Educación Psicomotriz pretende contribuir al desarrollo físico, intelectual, afectivo, social y moral del niño, finalidad que coincide con la que la LOGSE establece para la Educación Infantil. Elementos del currículo que se relacionan con el tema son:

ü Objetivos.

· Desarrollar una autonomía progresiva en la realización de las actividades habituales por medio del conocimiento y dominio creciente del propio cuerpo, de la capacidad de asumir iniciativas y de la adquisición de los hábitos básicos de cuidado de la salud y el bienestar.

· Ir formándose una imagen positiva de sí mismo y construir su propia identidad a través del conocimiento y la valoración de las características personales y de las propias posibilidades y límites.

ü Contenidos.

· Conocimiento del cuerpo: esquema corporal, lateralidad y coordinación motriz.

· Percepción y orientación espacial.

· Percepción y orientación temporal.

· Expresión corporal libre.

ü Metodología.

· Esquema corporal:

o Conocimiento de diferentes partes del cuerpo siguiendo leyes cefalo-caudal y próximo-distal.

o De equilibrio estático y dinámico.

o De desplazamientos.

o De respiración y relajación.

o De situación del cuerpo en el espacio.

· Coordinación motriz:

o Actividades que permitan dominar los distintos tipos de desplazamientos.

o Actividades de equilibrio con y sin objetos.

· Organización espacial:

o Ejercicios sobre distancias, situación en relación con los objetos.

o Ejercicios de orientación y reconocimiento espacial.

o La orientación temporal se trabaja a partir de los 7 años, pero en Educación Infantil se va introduciendo con ritmos, observación de acontecimientos, recuerdo de sucesos pasados,… La jornada escolar se organizará manteniendo constantes temporales o rutinas.

ü Evaluación psicomotriz: debe ser continua e individual y se realizará a través de:

· Observaciones puntuales directas sobre actividades.

· Observación a través de cuestionarios.

· Observación a través de escalas psicomotoras.

· Pautas y patrones de desarrollo.

· Actividades de control de procesos.

Los resultados obtenidos en la evaluación deben servir para la reestructuración del programa.O

3. LA SENSACIÓN Y PERCEPCIÓN COMO FUENTE DE CONOCIMIENTO.

Un niño con alguna deficiencia sensorial tendrá dificultad para adquirir determinados aspectos de la realidad. La educación sensorial pretende desarrollar al máximo las capacidades existentes y detectar las posibles deficiencias para compensarlas con el tratamiento adecuado. Dicho desarrollo se logra ejercitando los órganos sensoriales en los procesos de identificación, asociación, clasificación y seriación.

La sensación es la forma primera y más sencilla de vida mental. En toda sensación hay un componente físico (el estímulo) un componente fisiológico (receptor, órgano sensible y neurona) y un componente psicológico (toma de conciencia del hecho). Se producen a través de los sentidos (vista, oído, olfato, gusto y tacto) y son el punto de partida del conocimiento. La mente, las compara y asocia con experiencias sensoriales pasadas, las interpreta y les da un significado para ser una percepción.

La percepción tiene tres fases: sensación, discriminación e identificación de impresiones sensibles, y unificación de impresiones actuales con experiencias pasadas. Un fallo en cualquiera de ellas dará lugar a percepciones incorrectas, por lo que la Educación Sensorial debe asegurar el conocimiento del estímulo desarrollando y educando los sentidos para conocer el cuerpo, diferenciar sus partes y establecer relaciones con los objetos.

4. ORGANIZACIÓN SENSORIAL Y PERCEPTIVA.

4.1. PRINCIPIOS DE GIMENO PARA RECONOCER E INTERPRETAR LOS ESTÍMULOS.

El niño actúa en un espacio y en un tiempo. A partir de las sensaciones ORGANIZA el mundo, lo interpreta y lo reconstruye interiormente, ubica los estímulos en un espacio y un tiempo integrándolos con otras sensaciones y en la memoria.

Para GIMENO y otros hay una relación intersensorial que permite al niño integrar la información recibida desde diferentes sentidos, y una discriminación intrasensorial que los identifica. Para ellos, la organización sensorial sigue estos principios:

ü Efectos desencadenantes: un sentido recibe un estímulo y solicita la cooperación de los restantes.

ü Efecto simultáneo: un solo estímulo provoca la intervención de varios sentidos a la vez.

ü Efecto inhibitorio: varios sentidos actúan en un primer momento y por selección, se inhibe la acción de uno de ellos o de más de uno.

GIMENO considera la siguiente evolución de los distintos sentidos:

ü Percepción visual: cuando nace el niño tiene una agudeza visual pobre, pero progresa rápidamente. A los 3 meses perciben y diferencian los colores con precisión, prefieren los objetos de colores vivos, ver el rostro de la madre, los estímulos brillantes, los contrastes a la monotonía, el movimiento a lo estático, A los 5 meses ve casi igual que el adulto. Sus capacidades son:

· La discrepancia: atracción por estímulos diferentes a los ya conocidos.

· La complejidad: interés creciente por estímulos cada vez más complejos.

· Percepción de acontecimientos: sigue los objetos en movimiento.

· Percepción de profundidad: evitan las zonas que dan impresión de profundidad en ambiente preparado.

· Intermodalidad de la percepción: los diversos sentidos están coordinados entre sí. Reacciona visualmente ante un estímulo sonoro.

ü Percepción auditiva: los recién nacidos oyen y son sensibles a la intensidad de los sonidos: los ruidos fuertes les perturban, la voz de su madre y la música suave les tranquilizan. Son capaces de localizar el sonido girando la cabeza hacia su procedencia y diferencian la voz de la madre desde los primeros días. A los 2 meses distingue diversos sonidos silábicos.

ü Percepción olfativa: está muy desarrollada desde el nacimiento y giran la cabeza hacia los olores agradables o hacen muecas con los desagradables.

ü Percepción gustativa: desde el nacimiento hay preferencias de sabores: dulces sobre salados o amargos.

ü Percepción táctil: al nacer es su primer lenguaje pues a través de la piel se comunica con su madre y experimenta sus sentimientos.

4.2. LA ORGANIZACIÓN PERCEPTIVA EN EL PERÍODO DE 3 A 6 AÑOS.

Es la etapa de la oclusión perceptiva, y Piaget introduce en ella su periodo intuitivo. La percepción por los sentidos es la principal función del niño, tanto que predomina a las capacidades lógicas, por eso comete errores en su razonamiento (irreversibilidad de pensamiento).

Con 3 años identifica visualmente un objeto, distinguiendo su forma, tamaño y color. Le sirven de marco comparativo para clasificar otros nuevos que vaya conociendo. Realiza operaciones prelógicas de semejanzas, pertenencias, igualdad, concepto o grupo de cosas, diferencias, orden, espacio, verbalización.

A los 4 años se afianza en el dominio de estas tareas y consolida su conocimiento y aplicación de las propiedades perceptibles de los objetos (color, forma, tamaño, textura, grosor). (DEAÑO y VIDAL). Al establecer estas relaciones entre los objetos le facilita la cuantificación tanto indefinida (muchos, pocos, algunos, ninguno,…) como numérica (1, 2, 3,…).

Con 5 años utiliza las operaciones anteriores con mayor soltura, sujeto al matiz perceptivo; es incapaz de aislar e independizar los aspectos perceptivos de los lógicos o mentales. El desarrollo y perfección de la percepción espacial y temporal le facilitarán la capacidad de ordenar objetos y acontecimientos.

De 3 a 6 años juega simbólicamente (juego de roles), por lo que es capaz de representar objetos por otros de características semejantes o diferentes, y en lugares y situaciones distintas a sus contextos originales. La capacidad creativa y lúdica le hace evolucionar a través de la percepción y representación: el desarrollo motor y cognitivo actúan conjuntamente.

5. LA INTERVENCIÓN EDUCATIVA.

5.1. Instrumentos de la intervención educativa.

El educador puede valerse de dos instrumentos para el desarrollo integral del niño: la actividad corporal y el lenguaje.

La actividad corporal provoca múltiples experiencias con el mundo exterior de gran fuerza educativa y valor de motivación. Sus propiedades son:

ü El niño toma conciencia de todas las partes de su cuerpo, las utiliza y regula según la finalidad perseguida en cada momento e inhibe los movimientos innecesarios.

ü Construye los elementos de su esquema corporal y organiza sus percepciones y acciones dentro de una estructuración espacio-temporal adaptada a la realidad.

ü Llega a conocer las cualidades y pasa de la sensación a la percepción y de ésta a la representación mental. Las actividades manipulativas y las operaciones concretas con los objetos constituyen el fundamento necesario de la “inteligencia”.

ü La relación entre su actividad y los resultados de ésta le enseña a tomar conciencia anticipada de la finalidad de la acción y a formar planes previos a los que ajusta sus acciones.

5.2. Motivación.

Para que la labor educativa esté adaptada a las particularidades del niño, hay que tener en cuenta el aspecto motivacional: la educación habrá de estar de acuerdo con sus necesidades e intereses, organizando las actividades con carácter lúdico y que le gusten y le motiven.

Cuanto menor sea un niño, menor será la duración de la actividad y más rápido el cambio a otra, pudiendo ser variaciones de la misma que ayuda a mantener su atención. El resultado de la actividad también motiva para controlar y mantener su atención, por lo que tiene que ser claramente perceptible y atrayente.

5.3. El orden y la organización espacio-temporal en clase.

La atención en esta edad es frágil y dispersa, por lo que hemos de ayudarle a organizar su propio comportamiento y actividad tanto espacial como temporalmente. Hemos de facilitarle unas normas sencillas para organizar su actividad y que les lleve a respetar el orden general y las actividades de los otros. Tales normas han de proporcionarse en forma de juego y razonadas con argumentos que él pueda entender. Son:

ü Cada cosa en su sitio y un sitio para cada cosa.

ü Distinguir perfectamente cuando acaba una actividad y cuando se inicia la siguiente.

ü Recoger todo el material y colocarlo en su sitio al concluir cada actividad.

ü Espacio distinto para cada actividad.

ü Cada niño tendrá asignado su espacio para trabajar y moverse, cuidando de respetar el espacio de los otros.

ü La ordenación temporal de las actividades debe ser siempre la misma.

ü A una actividad temporal debe seguir otra de tipo más mental y tranquila, evitando caer en una espiral de excitación motriz.

ü Si el número de alumnos es grande organizaremos la clase en grupos pequeños que ocupen espacios distintos y realicen actividades diferentes. Cada espacio tendrá asignada una actividad determinada y los grupos irán rodando por todos los espacios hasta desempeñar todas las actividades.

En psicomotricidad podemos utilizar:

ü Rutinas cotidianas.

ü Actividades espontáneas.

ü Actividades sugeridas por los adultos.

6. BIBLIOGRAFÍA.

ANTÓN, M., “La psicomotricidad en el parvulario”. 1980.

DECRETO 107/92 de 9 de Junio por el que se establece el currículum de la Ed. Infantil para Andalucía.

DISEÑOS CURRICULARES BÁSICOS.

VAYER, “El diálogo corporal”.

PLANTEAMIENTO DIDÁCTICO (Temas 2 y 17)

Ø RELACIÓN DEL TEMA CON EL DISEÑO CURRICULAR.

Como hemos visto a lo largo del tema, la practica psicomotriz es muy importante por varias razones:

ü A través del movimiento el niño/a va a desarrollar sensaciones, percepciones, para dar paso, posteriormente, a la representación de la realidad.

ü La práctica psicomotriz es la que mejor globaliza las dimensiones de la personalidad del niño/a, ya que actuando sobre la realidad, el niño/a organiza y construye conocimientos (dimensión cognitiva), va a relacionarse y a comunicarse.

Según el Decreto 107/92 el objetivo que más se relaciona con el tema que tratamos es el:

a) Desarrollar una autonomía progresiva en la realización de actividades habituales, por medio del conocimiento y dominio creciente del propio cuerpo de la capacidad de usar iniciativas y de la adquisición de los hábitos básicos de cuidado de salud y bienestar.

Ø GRUPO DE ALUMNOS A LOS QUE VA DIRIGIDO EL PLANTEAMIENTO.

Son 23 niños/as de 3 años, forman parte de un colegio de una línea. La escuela está situada en un barrio periférico con nivel económico, sociocultural y educativo medio.

Desde el punto de vista evolutivo, a partir de los 3 años el niño muestra una mejora considerable en la coordinación de sus movimientos. De manera progresiva, en sus desplazamientos aparece el galope y el salto.

Entre los 3 y 4 años perfecciona la imagen global de su cuerpo, y progresivamente añade nuevos elementos segmentarios. Su pensamiento es egocéntrico.

De los 2 a 3 años aparece la función simbólica, y tiene una cierta dificultad por diferenciar la realidad de la fantasía.

El desarrollo del pensamiento lógico-matemático parte de un centraje (centrar la atención en un solo aspecto de la situación) y de una irreversibilidad (incapaz de captar que una operación pueda tener una doble dirección.

A los 3-4 años el niño/a emite frases telegráficas de aproximadamente 3 ó 4 palabras. Utiliza y reconoce un vocabulario de 900 a 1200 palabras. En un vocabulario habitual predominan los nombres y los pronombres posesivos.

El niño de 3 años empieza a tomar conciencia del propio yo y de su aceptación y estima.

Consideran las acciones como buenas o malas según sean indicadas o realizadas por los adultos.

Todas estas características habrán de tenerse en cuenta para poder adaptar nuestra actuación y planteamiento a ellos/as y así conseguir que el proceso de enseñanza-aprendizaje se realice de forma positiva.

En mi grupo de niños de los 23, hay un niño que presenta un 30% de hipoacusia, por lo que en la sesión que más adelante detallaré le hablaremos frente a él, si la música que acompaña a los ejercicios no la oyera bien puedo ponerla más alta o elegir música que él ya conoce por haberla trabajado en otras ocasiones (en las que se le ha dado la opción de escucharla con auriculares), ya que estos ejercicios musicales concretos no venían acompañados de movimiento.

Hay otra niña en el grupo que aún presenta bastante inmadurez y torpeza en sus movimientos, para dirigirla mejor yo mismo seré su pareja en los ejercicios que la requieran y en los que no la iré orientando.

Ø ÁMBITOS DE ACTUACIÓN EN QUE VA A CONSISTIR NUESTRA ACCIÓN.

¿Qué vamos a enseñar?.

La psicomotricidad se trabaja desde los distintos ámbitos del currículo.

A. Identidad y autonomía personal: en la que se pretende que los niños/as vayan consiguiendo un reconocimiento de su cuerpo, así como una valoración y control de sí mismos utilizando siempre sus recursos personales.

B. Medio físico y social: se pretende que el niño/a descubra su medio observando y explorando. En nuestro caso la psicomotricidad se trabajará a través de la percepción, la observación y la manipulación de objetos.

C. De comunicación y representación: los aprendizajes que incluyen en esta área proporcionan a los niños/as:

ü Una nueva forma de representación de la realidad.

ü Mayores posibilidades de comunicación y expresión.

Todo ello desde distintas formas de representación (expresión oral, plástica, musical, corporal, matemática).

Objetivos.

1. Tener una imagen ajustada de sí mismo identificando sus características personales.

2. Describir y utilizar las posibilidades motrices, sensitivas y expresivas de su cuerpo, a través de distintas formas de comunicación y representación.

3. Conocer, observar y manifestar elementos del entorno así como las modificaciones que sufren éstos por la acción de nuestro cuerpo.

4. Establecer relaciones sociales articulando los propios intereses con los de los demás, desarrollando actitudes de ayuda y respeto.

Contenidos.

A. Conceptos:

ü Conocimiento del cuerpo: segmentos, partes, articulaciones.

ü Los sentidos y sus funciones: vista-tacto-olfato.

ü Conceptos básicos: largo/corto, abrir/cerrar, grande/pequeño, alrededor.

B. Procedimientos:

ü Exploración e identificación de características y cualidades de objetos presentes en el entorno (rollo de papel higiénico).

ü Realización de desplazamientos diversos por el espacio.

ü Exploración e identificación de características y propiedades del propio cuerpo, tanto global como segmentariamente.

ü Identificar y realizar mediante distintas actividades los conceptos básicos programados.

ü Motricidad fina: rasgar, trocear.

C. Actitudes:

ü Valoración de la actividad individual y en grupo fomentando la ayuda y colaboración entre todos.

ü Aceptación de las consignas dadas para la correcta ejecución de la actividad.

ü Valoración positiva de sí mismo aceptando las propias posibilidades y limitaciones.

ü Gusto por este tipo de actividades de psicomotricidad.

ü Gusto por los ambientes limpios.

¿Cuándo lo vamos a enseñar?. Temporalización.

El taller de psicomotricidad se realizará durante todo el curso escolar, una vez a la semana con una sesión que duró entre 50 y 55 minutos.

¿Cómo vamos a enseñar?. Pautas metodológicas.

La forma de trabajar con el niño se basa en la experimentación y descubrimiento del mundo que le rodea: ningún concepto puede ser verdaderamente aprendido si no se ha vivenciado previamente. Por ello es necesaria una participación activa para que el niño sea creativo, se exprese corporalmente, se oriente en el espacio, descubra las formas de relacionarse con los compañeros y los objetos.

Poner a disposición de los niños todo tipo de materiales para que descubran y comuniquen sus experiencias.

La interacción de los conceptos trabajados se favorece a partir de la utilización del silencio como forma de reflexión.

Tener en cuenta el espacio físico en el que se desarrolla si no hay una sala de psicomotricidad adecuada, adecuar lo más posible nuestra aula, vacía con suelo protegido (con retales).

La actitud activa del maestro jugando con los niños influirá en que se tome con toda la seriedad precisa este tipo de clases que les ayudan de manera lúdica a conocerse mejor y a aprender de una forma distinta.

Toda sesión de psicomotricidad tendrá las siguientes pautas a seguir:

ü Descubrimiento individual por parte de cada niño/a del material presentado.

ü Propuesta del maestro/a de aspectos concretos a observar ofreciendo distintas formas de experimentar e interiorizar.

ü Reflexión individual, presidida por el silencio, sobre lo aprendido en la actividad. Esto se realizará mediante el relajamiento inducido por la suave voz del maestro/a que recordará todo aquello que se ha trabajado.

ü Recopilación simbólica en forma de trabajo individual y de grupo con los diferentes elementos plásticos que estén al alcance.

Lugar y materiales.

Como ya se ha mencionado el lugar apropiado sería el gimnasio o sala de psicomotricidad; en su defecto acondicionaremos nuestra clase.

Los materiales a utilizar pueden ser los propios de psicomotricidad, aros, cuerdas, sacos,…. o materiales de desecho: cajas grandes, cartones de leche,… En este caso en concreto vamos a utilizar rollos de papel higiénico.

Actividades.

1. Se juega con el rollo sin abrir:

ü Juego libre con música:

· Juego libre.

· Buscar un amigo/a y jugar con él/ella.

· Jugar con el rollo sin pararse, al son de la música.

ü Actividades dirigidas:

· Con distintas partes del cuerpo sujetar el rollo.

· Con distintos puntos de apoyo y en distintos planos.

· Desplazar el rollo sin manos, posibilitando exploraciones variadas: pies, cabeza, espalda, hombros, etc.

2. Juegos con el rollo de papel abierto:

ü Juego libre:

· Individual.

· Parejas.

ü Juego dirigido:

· Tirarlos como serpentinas y abrir el mayor espacio con el papel.

· Desplazarse por el espacio sobre el papel de diversas formas: arrastrándose, cubriéndose con él.

· Tapar a los compañeros con el papel.

· Hacer tiras del papel largas y cortas que después se colocarán pegadas en un papel continuo puesto sobre la pared.

· Con las tiras de papel sobrante se hará el juego del cazador y el conejo.

3. Relajación:

· Cada niño/a coge tiras de papel y las corta lo más pequeñas posible.

· Cubrir al compañero con el papel

· Con los rollos de cartón se darán masajes unos a otros, por la espalda, piernas, brazos,…

4. Aplicación en clase:

· Dibujo libre.

· Rincones: pintura de dedos, construcción de portalápices, poner un papel celofán de color con una goma y mirar a través de él, ensartar.

5. Recogida de todos los papeles.

Ø EVALUACIÓN.

¿Qué evaluamos?.

Evaluaremos tanto el proceso del niño como nuestra propia actuación.

¿Cuándo evaluaremos?

v Evaluación inicial: al principio de curso mediante la observación de los movimientos de los niños y haciendo un sondeo en forma de ideas previas, sobre lo que los niños hacen o no. Todo ello lo anotaremos para tener presente la situación de partida. En nuestras preguntas y observaciones tendremos presente tanto las acciones y movimientos que los niños/as de tres años pueden realizar.

v Evaluación formativa y continua: es la que realizaremos a lo largo de todo el curso. Nos indicará el avance de cada niño/a con respecto a su situación inicial, así como los bloqueos y dificultades que pueda tener.

v Evaluación final: en la que veremos si se han conseguido los objetivos propuestos o en qué grado los ha conseguido.

¿Cómo vamos a evaluar?.

Como ya hemos indicado apuntaremos en la lista de control lo que observamos que el niño/a va consiguiendo. La lista de control la tendremos elaborada previamente teniendo en cuenta lo que durante este curso queremos conseguir de nuestros niños/as. La lista de control de psicomotricidad para los niños/as de 3 años sería:

ü Lateralidad: (Escala de valoración: 1. SI, 2. NO).

· Tiene la Lateralidad definida

o Mano derecha.

o Mano izquierda.

o Pié derecho.

o Pié izquierdo.

o Los usa indistintamente.

o Tiene la Lateralidad cruzada.

o No se ha definido.

· Postura del pie:

o Posición correcta al caminar.

o Camina apoyándose en la punta del pie.

o Camina con los pies hacia fuera.

o Camina con los pies hacia dentro.

· Postura sentado:

o Posición correcta.

o Acerca mucho la cabeza al papel.

o Dobla demasiado la espalda.

ü Desplazamientos:

· Camina de lado.

· Camina hacia atrás.

· Anda de puntillas.

· Salta con los pies juntos.

· Sabe andar a la pata coja con el pie izquierdo.

· Sabe andar a la pata coja con el pie derecho.

· Corre con seguridad.

· Sabe reptar.

· Sabe rodar por el suelo.

· Sabe mantenerse en cuclillas.

· Camina a 4 patas.

· Sube y baja escaleras alternando los pies.

· Es capaz de seguir una línea dibujada en el suelo.

ü Habilidades motrices: (A = Fácilmente; B = Con dificultad; C = No sabe).

· Modelar plastilina.

· Modelar barro.

· Rasgar.

· Picar con el punzón.

· Recortar.

· Doblar.

· Enroscar.

· Ensartar.

· Abrochar.

· Desabrochar.

· Encajar piezas.

· Pegar.

ü Presión del instrumento: (A = correcta; B = incorrecta).

· Lápiz.

· Punzón.

· Tijeras.

ü Presión del instrumento: (A = Excesiva; B = Correcta; C = Poca).

· Lápiz.

· Punzón.

· Tijeras.

ü Conceptos básicos de medida y espacio:

· Grande.

· Pequeño.

· Muchos.

· Pocos.

· Cargo.

· Corto.

· Encima.

· Debajo.

Ø METODOLOGÍA.

Como ya he anticipado la metodología es global, abarcando todos los ámbitos del currículo. Además tendremos en cuenta lo siguiente:

ü Repetición de experiencias y situaciones para conseguir la asimilación y acomodación.

ü Variación de situaciones y experiencias con el fin de asegurar la consistencia y transferencia de las conductas adquiridas.

ü Uso de modelos significativos que despierten conductas de imitación y refuercen los aprendizajes.

ü Se pretenden aprendizajes significativos y funcionales partiendo siempre de las experiencias que tengan los niños/as.

ü Que el niño/a sea protagonista y activo.

ü Aceptación del ritmo personal de cada niño/a.

ü Intentar crear un clima de afectividad, confianza, cariño y libertad en donde se establezcan buenas relaciones entre la maestra/o y el niño/a.

ü Actividades mayoritariamente lúdicas.

Ø ADAPTACIONES CURRICULARES.

Debemos tener presentes algunas dificultades con que pueden encontrarse los niños/as como:

ü Un déficit debido a la falta de experiencias motrices.

ü Una disfunción en la que se manifiesta un funcionamiento pobre debido a un problema neuro-muscular.

ü Un retraso, en el que se evidencia una clara inmadurez en sus conductas motrices.

ü Desorganización en sus movimientos.

ü Una desviación, donde se destaca una clara alteración de sus rendimientos motores en relación a sus compañeros.

La determinación de la acción docente, es decir, tener en cuenta estos problemas que se pueden presenta, para readaptar los objetivos a los que puedan llegar y las actividades que puedan realizar, permitirá que vivan el éxito, mejoren su autoconcepto y aumenten sus aprendizajes motores.