Tema 37 – Principios de intervención en la etapa 0 a 6 años. Propuestas metodológicas. Criterios de organización y distribución de los recursos didácticos: tiempo y espacio. Selección y organización de los recursos materiales y del equipamiento. La evaluación de los recursos.

Tema 37 – Principios de intervención en la etapa 0 a 6 años. Propuestas metodológicas. Criterios de organización y distribución de los recursos didácticos: tiempo y espacio. Selección y organización de los recursos materiales y del equipamiento. La evaluación de los recursos.

INTRODUCCIÓN

La Educación Infantil tiene unos rasgos específicos:

ð Debe atender al desarrollo de la personalidad

ð Es importante lograr el desarrollo completo del niño/a

ð También que tenga muchas experiencias

ð El ambiente de clase debe ser lo más parecido posible al ambiente familiar

ð La dinámica de la enseñanza esta apoyada por la intuición y la acción

Por lo tanto la metodología deberá adaptarse a las características propias de los niños/as a los que va dirigida.

La organización cuidada y planificada del ambiente escolar es una pieza clave en el proceso educativo.

En este tema vamos a estudiar los elementos básicos que configuran la organización de un centro de EI, empezando por considerar los aspectos pedagógicos como la metodología y recursos que presiden la planificación educativa.

Finalmente un aspecto que no hay que olvidar nunca que es la evaluación, como elemento de mejora de la práctica educativa.

  1. PRINCIPIOS DE INTERVENCIÓN EN LA ETAPA DE 0 A 6 AÑOS: PROPUESTAS METODOLÓGICAS.

La metodología es el elemento del currículo que responde a la pregunta “¿Cómo enseñar?” y que determina profundamente la práctica diaria en el aula.

La exigencia de dotar de un sentido fundamentalmente educativo a la etapa, superando antiguos criterios meramente asistenciales, apela a la necesidad de explicitar los principios metodológicos que han de regir la intervención educativa en EI. Son:

® Principio de individualización, la educación se realizará teniendo en cuenta las necesidades de cada alumno/a, así como las características de su desarrollo. Cada periodo de desarrollo tiene unas posibilidades de aprendizaje que han de ser tenidas en cuenta. También tienen unos conocimientos previos.

® Principio de actividad, el alumno debe ser el principal protagonista del proceso educativo. La actividad es la principal fuente de aprendizaje y desarrollo de la etapa infantil, tanto para la construcción del conocimiento como para su desarrollo psicomotor. A través de la actividad, interaccionando con el medio y con los demás aprenden y transforman la realidad. Hay que respetar el ritmo de cada niño.

® Clima de seguridad y confianza, dadas las características propias de los niños de 0 a 6 años se hace necesario que la escuela infantil tenga un ambiente cálido y acogedor en el que se sienta seguro y confiado, que favorezca las relaciones interpersonales y la creación de una imagen positiva de sí mismo. El ambiente del aula debe favorecer la actividad de los niños. En el ciclo de 0 a 3 años tiene especial importancia, se enfrentan a un medio diferente y es la primera experiencia de alejamiento de la familia. Hay que atender a las necesidades biológicas y de afecto.

® Aprendizaje significativo, es un concepto planteado por Ausubel que supone la posibilidad de establecer vínculos entre lo que sabe y lo que se va a aprender. El aprendizaje no se produce por acumulación de nuevos conocimientos a loas que ya posee, sino que supone el establecimiento de conexiones y relaciones entre lo nuevo y lo ya sabido, experimentado o vivido. Partiremos de sus necesidades y de sus conocimientos previos

® Enfoque globalizador, la perspectiva globalizadora es la más adecuada para que los aprendizajes sean significativos. Se parte de la detección de centros de interés para los niños/as para poner en marcha el proceso de construcción de significados a partir de su propia implicación y motivación. El niño cuando es pequeño tiene un conocimiento global del mundo que le rodea. En el primer ciclo el enfoque globalizador se concreta en la atención a sus necesidades básicas y también estimulación.

® Las rutinas de la vida cotidiana, la vida cotidiana y sus rutinas son uno de los grandes recursos de esta etapa. En esta etapa tiene gran importancia la educación de hábitos. Se respetan los ritmos biológicos y las rutinas relacionadas con la alimentación, el sueño, el descanso, la limpieza… Las rutinas proporcionan al niño constancia y regularidad y le ayudan a interiorizar el tiempo.

® El juego, es la actividad más completa, más global y más creativa que los niños pueden realizar. Es una actividad voluntaria que proporciona placer, es una actividad libre con la que no pretende ninguna finalidad. A través del juego supera sus miedos, angustias y problemas; se relaciona con los demás, conoce su cuerpo, explora el entorno, logra mayor autonomía…

® Organización de los espacios, los materiales y el tiempo, una adecuada organización del ambiente es fundamental para conseguir los objetivos educativos. Tiene importancia para la motivación y para facilitarles la adquisición de nuevos conocimientos.

® Relación con los padres, la eficacia de la EI depende en gran medida de la unidad de criterios en los distintos momentos de la vida del niño, en casa y en la escuela. El principal objetivo es lograr la colaboración de los padres para compartir la tarea de educación de los hijos. Importante que los padres sientan seguridad y confianza del centro al que llevan a sus hijos. La implicación de los padres es tanto individual como colectiva y tanto sistemática como esporádica. A través de entrevistas individuales, reuniones informativas, colaborando en la realización de actividades, etc.

® El trabajo en equipo en el centro de EI, la existencia de un equipo educativo es fundamental para asegurar la coherencia y continuidad en la acción docente. Posibilita el intercambio y el enriquecimiento mutuo. Se deben seguir pautas comunes asumidas por todos.

Los diferentes tipos de metodología (propuestas metodológicas) más adecuados para esta etapa son:

§ METODOLOGÍA POR RINCONES

La organización de la clase por rincones es una propuesta metodológica que hace posible la participación activa de los niños/as en la construcción del conocimiento

Trabajar por rincones supone organizar la clase en pequeños grupos que desarrollan simultáneamente actividades diferentes. Dan la posibilidad de elegir y ser autónomos.

La distribución del aula se hace por zonas, esta distribución espacial proporciona una mejor estructuración de los materiales, una mayor organización y variedad de propuestas. El espacio debe estar organizado y el material al alcance. Cada rincón debe quedar recogido y el material colocado. Por los rincones van pasando todos los niños por grupos.

§ METODOLOGÍA POR TALLERES

Es similar a la organización por rincones. Concede especial importancia al desarrollo de habilidades y destrezas, a los hábitos y al aprendizaje de técnicas. Se fundamenta en el conocimiento del proceso de desarrollo del niño y en sus necesidades globales. Pueden ser talleres permanentes y complementarios.

§ METODOLOGÍA POR CENTROS DE INTERÉS

Su precursor fue Decroly. Consiste en el agrupamiento de contenidos y actividades educativas realizadas en torno a temas centrales de gran significado para el alumno/a. surgen de la vida del niño en la escuela, en la familia, en el barrio, etc. aspiran a proporcionar una educación integral abarcando todos los aspectos del desarrollo. Las fases de los centros de interés son: Observación/Asociación/Expresión

§ METODOLOGÍA POR PROYECTOS

Inspirado en las ideas de Dewey. Debe reunir una serie de condiciones:

– Que el alumno tenga una auténtica situación de experiencia

– Que posea una información

– Que las soluciones sugeridas se le ocurran a él

– Que tengan la oportunidad de comprobar los resultados

Existen muchas clases de proyectos, desde la construcción de un juguete hasta la representación de una obra.

  1. CRITERIOS DE ORGANIZACIÓN Y DISTRIBUCIÓN DE LOS RECURSOS DIDÁCTICOS.

Como ya se ha señalado en los principios metodológicos, la principal fuente para el aprendizaje infantil está en su propia actividad. Para poder realizar esta actividad los niños/as necesitan objetos y materiales con los que poder relacionarse.

Entendemos por recursos didácticos todos aquellos objetos, instrumentos, etc. con los que el niño/a puede relacionarse en su entorno escolar, independientemente de que hayan sido elaborados o no con fines educativos. Se trata de recursos que pueden ser utilizados en el aula/centro con una finalidad educativa.

Proporcionan a los niños/as oportunidades de manipulación, observación y experimentación.

El equipo docente tiene que hacer un análisis minucioso de los mismos antes de seleccionarlos. Hay que tener en cuenta las necesidades e intereses de los niños. Deben tener unos requisitos mínimos de seguridad y solidez; y deben ser sugestivos y variados. Deben favorecer fundamentalmente el juego. Deben tener un carácter global, ser sencillos y poco estructurados. Tener en cuenta la cantidad y la presentación. Que no favorezcan la discriminación.

Plantearnos la organización de los materiales en el aula es una tarea de primer orden en el proceso de planificación de la acción educativa, esta organización debe reflejar los principios básicos que presiden la planificación de la educación en este nivel sobre las bases de los intereses y necesidades del niño/a.

La cuidada organización y disposición de los materiales favorece el aprendizaje, la relación entre los niños y la adquisición de autonomía y de otros valores, actitudes y normas.

Deben considerarse preferentemente criterios de accesibilidad y visibilidad de los materiales de modo que inviten a los niños a actuar sobre ellos. Usar el tiempo necesario para que el niño los explore.

Hay que favorecer el uso autónomo, por lo que deben estar ordenados según criterios aceptados por todos. La ordenación de materiales es una tarea conjunta que favorece la creación de hábitos de orden.

Hay que responder a las exigencias de las diversas áreas curriculares. Los objetos tienen también un significado emocional, establece vínculos afectivos con ellos, por lo que le permite experimentar muy variadas emociones.

Deben estar cuidadosamente organizados, de forma agradable a la vista. De forma visible, a la altura de los niños y en recipientes claramente identificados. Cada espacio debe disponer del material necesario.

Hay que conservarlos el mayor tiempo posible y en las mejores condiciones, solo disponer el que se vaya a utilizar, se irán presentando poco a poco. Una vez utilizado recogerlo. Se revisará periódicamente.

Es interesante la confección de materiales por los niños. Pueden ser de material de desecho.

Los materiales curriculares son libros y materiales editados que sirven de apoyo a los procesos de aprendizaje de los alumnos y de orientación a los procesos de enseñanza de los profesores. El equipo de ciclo decidirá los que mejor se adapten a los objetivos educativos. Deben respetar la globalidad y ser sugerentes.

  1. TIEMPO Y ESPACIO.

Para conseguir los objetivos educativos de la Educación Infantil tiene gran importancia la ubicación, el diseño del edificio y la organización espacial.

La organización del ambiente coloca al niño en situación de ventaja para establecer relaciones con el entorno, experimentar libremente y explorar su mundo circundante de forma autónoma. La planificación del ambiente físico escolar proporciona una idea clara del modelo de escuela. El ambiente es un agente educativo de primer orden.

El ambiente general del centro es algo que el niño/a percibe desde el primer momento que llega a él.

No existen organizaciones del espacio modélicas o ideales, hay que tener en cuenta que todos los niños son distintos, los materiales que existen en las aulas son diferentes, no se cuenta con los mismos espacios, cada educador tiene su formación y experiencia, etc. cada uno debe buscar su propio modelo organizativo que fomente y permita la comunicación entre los niños y el trabajo en equipo desde una perspectiva lúdica.

Se pueden tener en cuenta unos criterios como punto de partida para la reflexión:

  • Se deben crear ambientes cálidos, acogedores y confortables
  • El ambiente tiene un carácter dinámico y cambiante en función de las necesidades e intereses infantiles
  • El espacio ha de ofrecer distintas posibilidades de acción e invitar al juego
  • Debe facilitar las relaciones e interacciones del grupo
  • El acceso a los espacios será fácil y el material estará al alcance de los niños
  • Adecuada distribución que tenga en cuenta los niños con n.e.e.
  • El ambiente ha de ser seguro y sano
  • Adaptado a las características psicoevolutivas

La decoración es muy importante para conseguir ese ambiente acogedor que ya he mencionado, debe estar adecuada a sus gustos e intereses. Es muy motivador decorar los espacios con sus propios trabajos.

Para distribuir el aula es adecuado hacerse un plano a escala y hacer en él previamente la distribución. La organización más frecuente en Educación Infantil es por rincones o talleres.

También hay que tener en cuenta los espacios comunes del centro y espacios donde permitir la relación con la familia. Es importante también la planificación del espacio exterior.

En cuanto al tiempo, otro de los aspectos fundamentales en la acción educativa hay que tener en cuenta las necesidades biológicas, que son las que marcan en un principio los ritmos y frecuencias necesarias para su orientación temporal.

Cuando un niño llega por primera vez a un centro de EI su vida se divide en dos periodos significativo:

– Tiempo que permanece en el centro, con otros niños y adultos

– Tiempo que está en el ambiente familiar, con sus padres

Por eso es importante, al igual que en la familia, establecer rutinas que proporcionen regularidad, frecuencias que ordenen la vida en el centro y lleven al niño a interiorizar ritmos y secuencias temporales.

Tomar decisiones sobre la organización temporal es necesario, pero se debe evitar tanto la excesiva división del tiempo como la rigidez. Es importante asegurar cierta flexibilidad, ya que los niños no pueden vivir con prisas y tensiones, sino en función de sus ritmos y necesidades.

Hay momentos que merecen especial atención:

· La llegada de los niños cada día

· Cuando se elige lo que se va a hacer o con que jugar

· La limpieza y las actividades que se realizan en el aseo

· Las actividades en gran grupo

· La comida

· La siesta

· Las actividades al aire libre

· La recogida del material

· La despedida

La intervención educativa debe planificar estas situaciones de forma que los niños y niñas perciban en ellas una relación personal e individualizada. Tener en cuenta que cada niño tiene su propio ritmo.

Hay que respetar la globalidad del niño, por lo que no es adecuada la organización del tiempo por áreas.

Hay que cuidar el equilibrio entre la actividad y el descanso, los tiempos para el juego espontáneo y los tiempos para las actividades dirigidas, los tiempos para las actividades grupales y los tiempos para las iniciativas de cada uno.

Hay varios factores que influyen en la distribución del tiempo:

û Edad

û Características del grupo

û Momento del año

û Personalidad y formación de cada profesional

û Duración de la jornada

û Organización general del centro

û Características de los espacios y recursos materiales y personales

Es necesario que los niños, en función de sus capacidades conozcan y comprendan el horario del grupo, ya que esto les ayudará a orientarse en el tiempo y a tener unos puntos de referencia claros. Las rutinas son muy útiles.

Es conveniente:

  • Charlar con ellos acerca de lo que van a hacer y han hecho a lo largo del día
  • Mantener los periodos de tiempo en los que se ha distribuido el horario
  • Ayudarse mediante símbolos o gestos para que los niños perciban claramente el inicio y el final de las distintas actividades.

La organización del tiempo es uno de los contenidos que el educador ha de comentar con los padres en la primera reunión de curso.

El tiempo y el espacio son elementos susceptibles de ser evaluados a fin de comprobar en qué medida favorecen u obstaculizan el logro de los objetivos propuestos. La observación sistemática y el registro de lo observado para su posterior análisis es el instrumento más adecuado.

  1. SELECCIÓN Y ORGANIZACIÓN DE LOS RECURSOS MATERIALES Y EQUIPAMIENTO, LA EVALUACIÓN DE LOS RECURSOS.

Hay unos requisitos mínimos en cuento a equipamiento en los centros de Educación Infantil. En el primer ciclo:

– Ubicación en locales de uso exclusivo, con acceso independiente desde el exterior.

– Una sala por cada unidad, 2 metros cuadrados por niño, mínimo 30 metros cuadrados. Salas diferenciadas para descanso e higiene.

– Un espacio adecuado para la preparación de alimentos cuando haya niños menores de 1 año.

– Una sala de usos múltiples de 30 metros cuadrados.

– Un patio de juegos por cada 9 unidades, no menos de 75 metros cuadrados.

– Un aseo por sala, destinada a niños de 2/3 años, visibles y accesible desde la misma.

En el segundo ciclo:

– Un aula por unidad, 2 metros cuadrados por niño, mínimo 30 metros cuadrados.

– Un patio de juegos, mínimo 150 metros cuadrados.

– Un aseo por aula.

El mobiliario ha de cumplir una serie de condiciones:

§ Seguro, estable, ligero y duradero

§ Se podrá limpiar fácilmente

§ Se desplazará de forma fácil

§ Permitirá distintos usos

§ Estará diseñado según el tamaño del niño

Tener en cuenta unos criterios de organización.

ü Un mueble colocado de formar perpendicular crea dos espacios distintos, también con estanterías

ü Los muebles deben ser bajos

ü Para marcar las zonas de paso se pueden utilizar traseras de los muebles, también para exponer trabajos.

ü Las alfombras se pueden utilizar para amortiguar ruidos y para actividades tranquilas.

ü Se pueden crear espacios horizontales con tarimas, colchonetas, trozos de materiales de distinta textura, dibujos en el suelo, alfombras, etc.

ü En las superficies verticales se colocará información o trabajos hechos por los niños/as.

ü Hay elementos que por sí solos crean espacios, una cocinita, una cesta de trapos, almohadas, etc.

ü Las exposiciones se pueden hacer sobre paredes, murales de corcho, estanterías, colgando de cuerdas con pinzas.

ü Se puede disponer de mesas variadas para distintas actividades.

El mobiliario del espacio exterior debe cumplir unas normas en cuanto a condiciones de seguridad y durabilidad y mantenimiento y conservación

Al considerar la evaluación como una actividad valorativa e investigadora hay que tener en cuenta todas y cada una de las variables que intervienen en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

La evaluación es un proceso sistemático de recogida de información rigurosa para la mejora del proceso de enseñanza-aprendizaje. Uno de los aspectos a evaluar son los recursos materiales empleados en dicho proceso, tenemos que valorar la idoneidad de los mismos en base a unos criterios:

– Si atienden a los intereses de los niños y los motivan

– Si satisfacen sus necesidades, especialmente las lúdicas

– Si responden a las exigencias de las diversas áreas curriculares

– Si estimulan la actividad

– Si facilitan la concentración en el aprendizaje

– Si usan el material el tiempo necesario

– Si provocan experiencias gratificantes

  1. CONCLUSIÓN

Este tema se relaciona con el ciclo de Técnico Superior en Educación Infantil y dentro de este ciclo son contenidos que corresponden al módulo de Didáctica de la Educación Infantil.

BIBLIOGRAFÍA

Aceña, JM y otros, La escuela infantil de 0 a 6 años. Editorial Anaya, 1988

Zabalza, Miguel Ángel, Didáctica de la educación infantil. Madrid, Narcea, 2002

http://www.ite.educacion.es/w3/eos/RecursosFP