Tema 24 – Animación cultural. Estrategias de intervención. Difusión, democratización y democracia cultural. Gestión cultural. Ámbitos de intervención. Proyectos de animación cultural: aplicaciones metodológicas. Diseño y elaboración de proyectos y programas. Modelos de proyectos. Instrumentos de evaluación. Organización de los recursos.

Tema 24 – Animación cultural. Estrategias de intervención. Difusión, democratización y democracia cultural. Gestión cultural. Ámbitos de intervención. Proyectos de animación cultural: aplicaciones metodológicas. Diseño y elaboración de proyectos y programas. Modelos de proyectos. Instrumentos de evaluación. Organización de los recursos.

1.- INTRODUCCION.

2.- ANIMACION CULTURAL.

2.1.- Características de la Animación Cultural.

2.2.- Animación

2.3.- Cultura

3.- ESTRATEGIAS DE INTERVENCION.

4. – DIFUSION, DEMOCRATIZACION Y DEMOCRACIA CULTURAL.

4.1.- Difusión cultural.

4.2.- Democracia cultural.

4.3.- Democratización cultural.

5. – GESTION CULTURAL.

6.- AMBITOS DE INTERVENCION.

7.- PROYECTOS DE ANIMACION CULTURAL: APLICACIONES METODOLOGICAS.

8.- DISEÑO Y ELABORACION DE PROYECTOS Y PROGRAMAS.

9.- MODELOS DE PROYECTOS.

Proyectos de Difusión Cultural.

Proyectos de expresión y creación.

Proyectos de promoción cultural

l0. – INSTRUMENTOS DE EVALUACION.

11. – ORGANIZACION DE LOS RECURSOS..

1.-INTRODUCCION

La Animación Cultural es una de las formas de Acción Social y tiene como finalidad última el cambio social a través de la promoción de la cultura.

La aparición de la animación cultural responde a una reacción frente al carácter inaceptable de una cultura cuya producción y transmisión están reservadas a una minoría privilegiada intelectualmente y/o económicamente y a un proyecto tendente a que los ciudadanos intervengan directamente en una cultura que viven cada día, participen en su creación y la integren en su desarrollo general.

Una política de promoción cultural acorde con esta idea pretenderá cumplir los siguientes objetivos:

– Atenuar, para finalmente eliminar, el handicap cultural y dar a todos iguales oportunidades en este campo.

– Disminuir, para suprimirlo finalmente, el vacío cultural entre los estratos sociales más desfavorecidos.

– Crear las condiciones adecuadas que inciten al mayor número de personas a revalorizar plenamente su potencialidad, así como los recursos que pueden encontrar en su asociación con otros.

Por otro lado no toda la animación es institucionalizada, la animación ha existido siempre de forma difusa. En los pueblos, en los barrios, ha habido siempre hombres y mujeres con cierta responsabilidad sobre los otros, que investidos o no de una función normal. se imponían como representantes, consejeros, responsables de un grupo. En la sociedad moderna se insiste en la animación hasta llegar a institucionalizaría; esto nos sugiere la necesidad de una animación difusa y de una animación institucionalizada, ambas complementarias y por lo tanto no excluyentes..

2.- ANIMACION CULTURAL

A menudo se asocia la acción cultural a la utilización del tiempo libre de los ciudadanos; sin embargo, la animación cultural es algo más que estimular a llenar su tiempo libre, el ocio es condición necesaria para la cultura pero no suficiente.

El ocio en su sentido más elevado es el que posibilita y da lugar a la creatividad cultural entendida como “el nivel efectivamente actualizado del potencial de creación humana, de expresión y de interacción puesto al alcance de los individuos y de los grupos en el seno de la comunidad”. Esto es lo que pretende conseguir la “animación cultural”, frente a una función de mera “difusión cultural”, que mantiene a los individuos pasivos e improductivos.

2.- Características de la Animación Cultural

– Participación activa, no directividad

– Contacto con toda la población

– Progresismo, liberación, libre expresión, creatividad

– Comunicación recíproca, facultad de expresión para todos

– En todos los ambientes, accesible a todos

– Valoración del grupo

Una política cultural no solamente prevé actividades y agentes culturales, sino todos los medios requeridos. Uno muy específico son los centros cívicos o centros culturales.

La animación cultural en lo que tiene de “transformación cultural”, de “rescate de la cultura” sólo puede sostenerse éticamente si se asume una actitud liberadora, desde la propia acción de las personas, del grupo. La base ética de toda animación cultural está en pasar de ser “objeto” a ser “sujeto”.

Terminaremos este apartado definiendo los dos términos claves utilizados “animación” y “cultura” aportando lo que entenderemos por ellos a lo largo del desarrollo del tema.

2.2. – Animación

Ander-Egg define la animación como acción de estímulo y movilización de individuos, grupos y colectividades. Es una forma de infundir ánimo e insulfar dinamismo y entusiasmo. Dar vida y movimiento a un conjunto de personas, excitar a la acción.

En cuanto forma de acción cultural, la animación nace como un medio de promoción de actividades destinadas a llenar creativamente el tiempo libre; atenuar el desarraigo que producen los grandes centros urbanos; evitar que se ahonde aún más la brecha o foso cultural existente entre diferentes sectores sociales; desbloquear la comunicación social mediante la creación de ámbitos de encuentro que faciliten las relaciones interpersonales; y estimular la realización de actividades que desarrollan expresión, iniciativa y creación de la misma gente.

La incorporación de la animación como forma de acción dentro de la política cultural implica adoptar una modalidad de acción cultural de signo progresista, expresada en términos de “democracia cultural” o de “democratización de la cultura”.

2.3.- Cultura[1]

La cultura tiene múltiples significados, es una palabra polisémica, pero a pesar de ello un referente mínimo que nos permite saber a qué nos referimos cuando hablamos de cultura. Por cultura no referimos al elemento más diferencial del hecho humano. En sus variadas acepciones subyace siempre la misma idea de que se trata de algo diferente a la naturaleza, de algo que es hecho por el mismo hombre.

En cuanto a las concepciones más globales y totalizantes de la cultura, podemos hablar de tres, según las expone E. Ander-Egg en “La Animación y los Animadores”.

– La cultura como adquisición de un conjunto de saberes, como resultado de dicha adquisición y como producción de “cosas superiores”.

– La cultura como estilo de ser, de hacer y de pensar, y como conjunto de obras e instituciones

– La cultura como creación de un destino personal y colectivo.

En esta última concepción la cultura se considera fundamentalmente un proyecto a construir o como un futuro a inventar. Una cultura está viva, cuando sin perder el sentido del pasado, actualizando las tradiciones vivas, es capaz de cambiar y mantenerse en movimiento hacia adelante.

Siguiendo el hilo argumental de esta última concepción podemos decir que existe una gran variedad de culturas, lo mismo que existen varios grupos sociales diferenciados.

No existe, pues, una cultura con un público, sino culturas con públicos, es decir, “subculturas”. Cada público tienen sus aspiraciones y sus necesidades propias. Esta diversidad de públicos exige una diversidad cultural que ofrezca a los individuos y a los grupos una posibilidad de elección.

La noción de Animación Cultural posee una importante tradición en España. Parte del presupuesto de la necesidad de animar lo inanimado y del constante riesgo de que la cultura caiga en lo inanimado. Intenta aportar herramientas de conocimiento y de educación artística para enriquecer la creatividad personal y de las comunidades. Otorga a la actividad cultural la función de incrementar y fortalecer la mediación entre los productores y los receptores de cultura. Sus tesis principales son el desarrollo de las comunidades y el necesario apoyo a la intermediación, que conlleva una gran importancia de lo pedagógico.

3.-ESTRATEGIAS DE INTERVENCION

No existe una metodología única y específica de Animación Cultural; existen diferentes propuestas metodológicas. Sin embargo, dentro de esa variedad existe un elemento o aspecto en común: se trata de una metodología participativa que en todos sus momentos, fases o acciones, tiende a generar procesos en los que se implica a la misma gente.

Por ser una metodología participativa, es flexible y adaptativa a cada aplicación concreta. Es decir, se cambia y enriquece de acuerdo con las intervenciones y aportes de la misma gente, de sus intereses y preocupaciones.

La propuesta metodológica que aquí planteamos exige realizar cuatro tareas básicas:

– Un estudio-investigación que se expresa en el diagnóstico cultural.

– Una programación de las actividades que se quieren realizar

– La intervención propiamente dicha.

– La evaluación de la actividad realizada.

Para actuar con eficacia y coherencia es preciso conocer la realidad sobre la que se va a actuar con el fin de diagnosticar necesidades y problemas.

Como guía o esbozo metodológico que sirva para realizar la investigación y elaborar un diagnóstico de la situación cultural proponemos los siguientes ítems:

3.1.- Referencia a la situación global

Ninguna situación cultural se da en el vacío; para comprenderla hay que estudiarla con todos los vínculos, relaciones y mediaciones que tiene con la totalidad social de la que forma parte. Para una acción cultural eficaz. es imprescindible disponer de una información lo más completa posible de la situación de la sociedad en la que se va a realizar la acción.

El alcance que ha de tener el estudio para disponer de una información lo más completa posible comprende los siguientes aspectos:

– Información demográfica fundamental.

– Factores económicos.

– Factores sociales.

– Factores psicosociales.

– Factores políticos que inciden de manera más directa en la situación cultural.

3.2.- Características de la situación cultural.

Es preciso advertir que la noción “situación cultural” es un concepto abstracto y difícil de definir – y más aún de cuantificar -, de ahí que sólo se pueda inferir de manera indirecta través de algunos indicadores que pueden considerarse como los más relevantes de la misma:

VIDA CULTURAL

1.- Cómo se informa a la gente sobre las actividades culturales.

2.- Tipo de actividades que se desarrollan; contenido y orientación de las mismas:

3.- Servicios culturales que se ofrecen. Actividades y manifestaciones culturales de mayor arraigo.

4.- Detección de las personas y colectivos que tienen una mayor participación en la vida culturales; es importante detectar las minorías activas y grupos de incidencia que puede participar en los programas de animación.

5.- Modo de concebir y desarrollar las actividades culturales.

6.- Tradiciones más significativas.

7.- Gustos y preferencias expresados por la gente.

8.- Manifestaciones culturales que influyen en la formación de sus gustos actuales.

9.- Principales destinatarios de las actividades que se realizan.

POTENCIAL CULTURAL

1.- Recuento de organizaciones e instituciones que promueven actividades culturales públicas y privadas

– estructura funcional de las mismas; capacidad

– disponibilidades financieras;

– recursos humanos disponibles;

– sistemas de relaciones existentes entre las actividades culturales.

2.- Infraestructura y equipamiento cultural

– bibliotecas; casas de cultura;

– teatros; cines;

– centros sociales; centros recreativos y culturales;

– salas de exposiciones; salas de conciertos; etc.

MODOS O ESTILOS CULTURALES

1.- Modelos y patrones culturales dominantes.

2.- Valores culturales dominantes.

3.- Procesos culturales más importantes.

Las pautas o indicaciones presentadas para realizar el estudio de la situación global y la caracterización de la situación cultural, no son exhaustivas. Se pueden excluir unas y agregar otras.

3.3.- Estudio de las necesidades culturales

El estudio de las necesidades culturales debe realizarse teniendo en cuenta la extensión que abarca el ámbito o sector en donde se va a realizar el proyecto cultural o las actividades culturales. Este ámbito operativo puede ser un grupo, una organización, un barrio, un municipio, zona o región.

La necesidad cultural no es un dato que está ahí y que hay que recoger, es una noción relativa, condicionada por nuestra ideología, por observaciones personales y por impresiones frecuentemente subjetivas.

Digamos, ante todo, que entendemos por necesidades culturales todas aquellas que se relacionan con los procesos de autorrealización y de expresión creativa. Se nutren. principalmente. de las actividades que favorecen la adquisición de conocimientos y el desarrollo del uso crítico ilustrado de la razón; de las que permiten el acceso a determinados bienes; de las que favorecen la expresión. constituyendo a su vez, formar de iniciación o de desarrollo de los lenguajes creativos; de las manifestaciones lúdicas de la creación de ámbitos de encuentro y comunicación que favorecen la vida asociativa.

Como antes mencionamos. los tres ámbitos operativos principales en los que se puede promover y desarrollar programas de Animación Cultural y en donde, consecuentemente. se deben realizar estudios de necesidades culturales son:

el grupo

la organización o institución

la zona o área territorial

Con respecto a estos tres ámbitos de actuación, haremos una breve referencia a los aspectos fundamentales que hay que estudiar y a las técnicas a utilizar para conocer las necesidades culturales.

Estudio de las necesidades culturales de un grupo

En general, tratándose de un grupo, hay que conocer las siguientes cuestiones:

– cuál es la forma o formas principales de llenar el tiempo de ocio;

– en qué otras actividades desearían ocuparlo, si pudieran;

– cuáles son los motivos principales por lo que cada uno pertenece a este grupo;

– cuáles son los objetivos del grupo;

– qué quiere realizar el grupo en cuanto a actividades culturales;

– qué ha realizado, cuál es su práctica;

– qué expectativas tiene el grupo en cuanto a la realización de un programa de animación cultural.

Para conocer las necesidades culturales de un grupo podemos utilizar como técnica la reunión (adecuadamente preparada).

Estudio de las necesidades culturales de una organización

El estudio será bastante diferente según la índole de la institución que desea promover las actividades: una escuela, un centro social, una asociación de vecinos, una casa de la juventud, una institución cultural. etc.

Conviene estudiar, fundamentalmente las siguientes cuestiones:

– estructura funcional de la institución.

– aspectos normativos de la institución, disposiciones, reglamentos etc.. que regulan las actividades culturales

– aspectos técnicos-operativos que hacen referencia a los principales rectores y a la modalidad de llevar a cabo las actividades culturales

– actividades culturales que ha realizado la institución

– actividades que desearía realizar y no lo ha hecho

Para este ámbito de estudio, las técnicas a utilizar pueden ser:

– recurso de la documentación: actividades que se realizan propuestas de actividades programadas y no realizadas, etc.

– entrevistas con los responsables de la institución y con los usuarios.

– observación.

Estudio de las necesidades culturales de la población de un área: barrio, pueblo o ciudad

Ya que dentro de un área geográficas existen diferentes tipos de usuarios los criterios para el estudio de necesidades serán los siguientes:

1.- Características de la población.

2.- Grupos específicos, ya sea porque están conjuntados en organizaciones o instituciones, o bien porque se trata de grupos informales que tienen necesidades comunes.

3.- Ubicación geográfica: según subáreas o sectores; lugar de residencia. posibilidades de acceso a los servicios culturales, equipamientos e infraestructuras disponibles, etc.

4.- Existencia de áreas policulturales o poliétnicas, que hacen más complejo un estudio de este tipo.

En cuanto a las técnicas a utilizar sugerimos las siguientes:

– estadísticas e informes que hagan referencia a la situación del área en aquellos aspectos que permiten inferir las necesidades culturales.

– entrevistas individuales y grupales, estructuradas y no estructuradas.

– observación participativa.

– técnicas de grupos nominales y foro de la comunidad.

– censos de conducta.

– informantes-clave.

– grupos de creación participa

3.4.- Estudio de la demanda cultural

La razón que justifica este estudio – que es diferente al de las necesidades – es obvia: ¿de qué sirve una oferta cultural sino existe una demanda de lo que se ofrece?. Es necesario conocer todo lo referente a los gustos y preferencias expresadas por la gente, a los que aludíamos en el párrafo de la situación cultural.

Lo que se pretende con el estudio de la demanda es prestar atención efectiva a las distintas clases de público.

El estudio de la demanda cultural debe realizarse teniendo en cuenta las distintas categorías de usuarios culturales:

– Usuarios habituales.

– Usuarios potenciales

– No usuarios

Insistimos en la importancia de tener en cuenta, en todos los casos, los diferentes sectores específicos de la población en cuanto a la demanda diferenciadas de cada uno de ellos.

3.5.- Jerarquización de necesidades y problemas

No basta con haber obtenido un listado de necesidades y problemas, es necesario establecer una jerarquización de los mismos. Los criterios para establecer la jerarquización serán los siguientes:

– ideológico-políticos

– técnico-operativos.

La jerarquización de necesidades se hace a efectos de establecer prioridades en la fase de programación.

3.6.- Inventario de los recursos disponibles

Un programa o simplemente una actividad cultural, puede desembocar en un fracaso si no se presta la debida atención a los recursos para llevarlo a cabo.

Hay que distinguir cuatro tipos de recursos: materiales. Financieros, técnicos y humanos.

En el contexto de la animación cultural como en todas las técnicas sociales la metodología del proceso de intervención implica consideraciones relacionadas con otras tres además del diagnóstico ya expuesto.

– La programación de actividades, la cual puede estudiarse en el epígrafe 7

– La intervención propiamente dicha.

– La evaluación de la actividad realizada.Epígrafe 10

En cuanto a la intervención propiamente dicha, existen dos estrategias diferenciadas: normativa y participativa

INTERVENCIÓN NORMATIVA

– El animador interviene como un consejero, comenzando el diálogo con los diferentes miembros de un grupo.

– Se define el problema de manera sistemática y se formulan hipótesis.

– Se programa el proceso de aplicación de las hipótesis elegidas.

– Se comienza el proceso de intervención, evaluando periódicamente los efectos de las actuaciones realizadas.

– Se procede a la evaluación final y a la toma de decisiones normativas.

INTERVENCION PARTICIPATIVA

– La comunidad es la que analiza, define y resuelve el problema.

– El fin último de la intervención es la transformación social.

– La intervención participativa exige la participación plena e integral de la comunidad.

– El proceso de intervención participativa puede suscitar una mejor toma de conciencia de quienes intervienen en el.

– La participación de la comunidad facilita un análisis más preciso de la realidad social.

– El animador aquí, es un participante comprometido que aprende durante la investigación. Adopta una actitud militante y no se refugia en la indiferencia.

4. -DIFUSION, DEMOCRATIZACION Y DEMOCRACIA CULTURAL

Al referirnos a estos términos: difusión, democratización y democracia cultural, vamos situándonos ante tres concepciones distintas de hacer política cultural. Como cualquier otra forma o modalidad de intervención sociocomunitaria, la Animación cultural adquiere su pleno significado dentro de los parámetros ideológico políticos desde los que se conciben o realizan esas prácticas. Admitido este hecho, se comprende que de él se deriva la existencia de diferentes concepciones de la Animación Cultural de las cuales hablaremos a continuación.

4. l. Difusión cultural

Con esta expresión se designan la diversas formas o modalidades que puede asumir la transmisión y/o representación de bienes y obras culturales, creando las condiciones para que los posibles usuarios entren en contacto con el bien o servicio cultural deseado.

La función de transmisión/comunicación de las obras y bienes culturales se da a través de los cines, librerías, bibliotecas, museos, etc., que son lugares en donde gratuitamente o previo cierto pago, o bien por medio de préstamo, se logra el contacto entre el “bien cultural” y el “consumidor”. Por otro lado, la representación de obras culturales, cuyo disfrute y goce se limita normalmente a una sola ocasión, se da a través de recitales, festivales, representaciones teatrales y escénicas y otras manifestaciones similares cuya característica común es que se consumen en el mismo acto de la representación, el acto puede repetirse, pero es otra representación.

El rol institucional de esta forma de intervención es el de hacer circular todo tipo de discurso cultural de la manera más eficaz y amplia posible.

3.2.- Democratización de la cultura

Es la forma de política y de acción cultural que consiste en difundir los beneficios de la cultura al conjunto de la población, ampliando el acceso del gran público a la vida artístico-cultural. Es decir, la forma de facilitar el acceso a los bienes culturales.

La práctica de la democratización cultural consiste en proporcionar conocimientos culturales y hacer participar de los beneficios de la elite cultural y de lo que esta produce.

Procura cerrar la brecha o foso cultural que produce la desigualdad en la posesión y acceso de los bienes culturales y corregir los desajustes funcionales que dentro del sistema social producen estas desigualdades.

La democratización de la cultura no consiste solamente en hacer accesibles las obras de arte, por ejemplo, organizar exposiciones en galerías y mantener a un nivel razonable los precios de las entradas a los teatros y a las salas de conciertos, sino, además, educar a las personas para que comprendan la significación y la profundidad de la obras de arte.

La democratización de la cultura presenta una doble vertiente: significa, a la vez, acercar la cultura y las artes a la personas y acercar a las personas a la cultura y las artes.

3.3. – Democracia cultural

Mientras la democratización cultural constituye un proceso que tiende a una mejor “distribución” de la cultura, la democracia cultural va más allá: su realización supone “transformaciones estructurales” que fortalecen el tejido social mediante una mayor participación de la gente.

Lo sustancial de esta concepción consiste en asegurar que individuos, organizaciones de base, comunidades y pueblos dispongan de los instrumentos y espacios necesarios para que con libertad, responsabilidad y autonomía puedan promover procesos de participación de la vida asociativa en la realización de las actividades culturales.

Toda política que procura la realización de la democracia cultural conlleva una forma de acción cultural cuyo objetivo va más allá de promover el acceso a la cultura (en el sentido de apropiación de los bienes culturales); lo que caracteriza a la democracia cultural es la participación de los grupos sociales, en la creación, administración, gestión y transmisión de cultura. La democracia cultural procura generar procesos de participación en la vida cultural.

5.- GESTION CULTURAL

Desde la animación cultural existe la necesidad de articular fórmulas de gestión mixta es decir, compaginar fórmulas específicamente administrativas con otras iniciativas de carácter privado, emanadas de la propia sociedad.

Las instituciones públicas habrán de aprender a conocer y a comprender las comunidades sobre las que se insertan y proceder a una descentralización en la toma de decisiones y en la organización de los recursos, colaborando así en la promoción de la participación efectiva de los interesados en las decisiones que les afectan.

La gestión cultural ha de basarse en los siguientes principios básicos:

Descentralización y desburocratización de las actividades culturales.

Esta descentralización supone que las decisiones sean tomadas en el nivel más cercano a la población destinataria. También supone una descentralización de los recursos económicos, materiales y humanos a través de la presencia de animadores culturales y de la existencia de dotación de material y de servicios.

Participación, a través de:

una amplia información previa de objetivos y acciones

realización de encuentros de entidades culturales

búsqueda de formas organizativas para la representación de las instancias interesadas.

– La equidad en la distribución de apoyos a las iniciativas culturales, con intervención de los interesados y sujeción a criterios públicos y generales.

Integración de las acciones del Poder Local y de las iniciativas de base en un planteamiento más amplio.

– La coordinación de las diferentes iniciativas.

– La formación de los animadores y el apoyo a la creación de núcleos y sectores culturales. Por ejemplo: Casas de cultura, Casa de la Juventud. etc.

– La diversidad en la promoción de iniciativas cultural.

– La información: asegurar una actividad permanente de información a la comunidad.

Por otro lado, el Estado tendrá una actuación directa en todo lo que concierne a la conservación del Patrimonio Cultural, a la riqueza artística e histórica de la nación y a la protección de los monumentos nacionales o de los lugares notables por su belleza natural o por su significación histórica o artística.

La gestión en Animación Cultural consiste en fijar unos objetivos claramente definidos en el tiempo y en el espacio, organizar todos los recursos humanos y materiales según una metodología de trabajo adecuada y controlar los resultados obtenidos, de forma que se puedan introducir las correcciones necesarias para conseguir los objetivos en las mejores condiciones de eficacia.

Si hablamos de gestión institucional podemos decir que las instituciones realizan la gestión por medio de financiación directa de programas culturales que ellas mismas realizan, por ejemplo, la gestión de una biblioteca pública o de un bibliobus ó apoyando directamente a proyectos que presentas asociaciones u otras entidades, si estos afectan al bien cultural común.

Otra vía de gestión son los convenios que administraciones como las autonómicas o Diputaciones pueden establecer con corporaciones locales para financiar actividades de difusión cultural; en este tipo de convenios las partes se comprometen a financiar las actividades en común.

Otro modelo son son las subvenciones. Desde todos los ámbitos de la administración, se convocan anualmente subvenciones dirigidas a asociaciones que tienen por finalidad el fomento de las actividades culturales.

También se convocan concursos, premios, certámenes, etc. que tienen como finalidad potenciar las distintas modalidades de la cultura y del arte. Por ejemplo concursos de pintura, fotografía, etc. Los jóvenes merecen una especial atención en este aspecto, convocándose anualmente certámenes artísticos de todo tipo.

Por último hemos de mencionar que exista la vía de la gestión privada mediante casas comerciales, fundaciones, sponsor, que también apoyan iniciativas de carácter cultural.

6. – AMBITOS DE INTERVENCIÓN

La animación cultural puede realizarse en ámbitos muy diversos: desde la acción en grandes centros cívicos instalados en locales permanentes, a exposiciones de calle; desde pequeños grupos a proyectos amplios de difusión cultural. Abordaremos este apartado realizando una clarificación de los múltiples ámbitos.

Por Sectores Sociales

1.- Infancia. Se trata de darles a los niños elementos culturales basados principalmente en tos aspectos lúdicos y recreativos. Las actividades pueden ser muy variadas: canciones, concursos, expresión corporal, payasos, marionetas. Uno de los equipamiento más novedosos en este campo son las ludotecas.

2.-Juventud. Ya hemos mencionado distinto equipamientos juveniles en relación con la Animación cultural, de igual modo a lo largo de esta clasificación se mencionan distintos tipos de ámbitos de intervención cultural destinados a los jóvenes.

3.-Adultos. Desde la Educación de Adultos podemos referirnos a diversos programas que tienen por objeto la animación cultural además de la formación. Estos programas se refieren a actividades que tiene por objeto la difusión de la cultura y a actividades que tienen por objeto la realización de actividades artísticas. Es importante destacar la labor por el teatro que se hace desde la Educación de Adultos.

4.-Tercera Edad. Las actividades más sobresalientes en lo referente a este sector en los aspectos culturales son las de difusión cultural y las aulas culturales. Estas actividades se canalizan a través de los centros y asociaciones de jubilados.

5.- Minorías culturales. En este sentido se realizan campañas de intervención cultural dirigidas a informar sobre valores culturales de cada minoría y de invitación a participar en sus fiestas. También se trata de que los grupos étnicos y culturales mantengan las tradiciones, el folklore y la lengua

6.- Grupos sociales desfavorecidos

El colectivo de mujeres es uno de los que más destacan en este ámbito. Múltiples asociaciones y también la administración llevan a cabo programas que pretenden promocionar el nivel cultural de las mujeres.

El sector de los minusválidos también cuenta con múltiples organizaciones tanto privadas como públicas de organizan actividades y recursos de promoción cultural.

La población penitenciaria también cuenta con programas de animación cultural. Respecto a esta cuestión el Ministerio de Cultura (1987) organizó un plan de animación cultural en las cárceles españolas, y la mayoría han respondido con proyectos concretos. Las actividades más destacadas han consistido en taller de fotografía, modelado de barro, ornamentación, danza. música, etc.

Drogodependencias y animación cultural es otro ámbito importante de actuación. En el aspecto de la prevención es donde tienen sentido programas y actividades de carácter cultural: si conseguimos que la juventud viva con ilusión, participe en las actividades colectivas y adquiera hábitos culturales, no necesitará evadirse de la realidad para refugiarse en paraísos artificiales.

Según la estructura institucional, se puede hacen animación cultural desde el sector público, privado, no lucrativo, comercial.

Según el ámbito territorial, la animación cultural puede hacerse en función del territorio: el barrio, el municipio, la ciudad, la provincia, la comunidad autónoma…

Otro modo de clasificar la intervención de la animación cultural es en función de las actividades y los intereses de los individuos. Así presentamos una clasificación de las actividades culturales:

1.- Actividades de difusión.

– Del patrimonio heredado, mediante visitas a Monumentos históricos, museos, galerías de arte, bibliotecas, fonotecas, videotecas

– De la cultura viva

2.- Actividades artísticas.

Se trata de actividades que favorecen la expresión y que constituyen formas de iniciación de desarrollo de los lenguajes creativos y de la capacidad de innovación y búsqueda de nuevas formas expresivas:

– Artesanía o arte popular

– Artes visuales

– Artes escénicas

– Danza

– Música y canto

– Lenguaje y literatura

– Nuevas formas de cultura

3.- Fiestas

Actividades que favorecen la vida asociativa y el reencuentro con costumbres y tradiciones.

7. – PROYECTOS DE ANIMACION CULTURAL: APLICACIONES METODOLOGICAS

Los proyectos de animación cultural pueden tener diferentes niveles de aplicación que van desde los más genéricos a los más específicos.

– Los proyectos de difusión cultural son los más genéricos, pues pretenden llegar a un amplia numero de personas y tienen objetivos muy generales. Las técnicas que se utilizan llegan a un amplio número de personas. Con ellos se intenta movilizar a personas y grupos a fin de que conozcan el hecho cultural y lo divulguen como patrimonio común. En cuanto a los destinatarios se puede inferir a cuantas personas llegará el proyecto, pero estas permanecen en el anonimato. Disponen normalmente de excelentes recursos económicos; así como otro tipo de recursos de tecnología avanzada.

– Los proyectos de expresión y creación son algo más Concretos. Se trata de programas vinculados a la cultura colectiva que movilizan un amplio abanico de recursos y disponen de un notable contingente de usuarios. El sector juvenil es el que predomina en este tipo de proyectos.

– Los proyectos de promoción cultural son más específicos. Con ellos se pretende dinamizar un grupo o una comunidad concreta de modo que pasen de una situación de marginalidad más o menos acusada a un estado de participación en el proceso cultural. Intentan cubrir en ciertas personas unas necesidades básicas no sólo de conocimientos. sino también de habilidades y técnicas prácticas y utilitarias. En estos proyectos se conoce a las personas concretas y sus necesidades culturales. Se utilizan técnicas muy específicas de animación y lugares concretos. Normalmente disponen de menos recursos en todos los aspectos. pero principalmente en los económicos.

8.-DISEÑO Y ELABORACION DE PROYECTOS Y PROGRAMAS

Según E. Ander-Egg, programar es la acción consistente en utilizar un conjunto de procedimientos mediante los cuales se introduce una mayor racionalidad y organización en un conjunto de acciones y actividades, previstas de antemano, con las que se pretende alzar determinadas metas y objetivos, por medio de la utilización de instrumentos técnicos, teniendo en cuenta que los medios y recursos son escasos y limitados.

Los principales criterios para la elaboración de programas y proyectos en animación cultural son los siguientes:

– Definir y enunciar claramente los objetivos.

– Proponer objetivos y metas realistas.

– Establecer prioridades para el logro de los objetivos.

– Hacer elecciones compatibles y complementarias entre los objetivos.

– Articular coherentemente los diferentes aspectos, es decir, coherencia entre los medios y los fines.

– Asignar y usar los recursos, en cantidad y tiempo oportunos, para cada fase o actividad del programa o proyecto.

– Determina los instrumentos y medios adecuados a los fines.

– Establecer el tiempo y el ritmo del programa o proyecto.

Hemos dicho que programar es un procedimiento para introducir racionalidad y organización en la acción con el propósito de alcanzar determinados objetivos. Esto, desde el punto de vista operativo, ya sea a nivel individual como a nivel institucional, comporta dar respuesta a diez cuestiones básicas:

1.- QUE se quiere hacer, naturaleza del programa, tipo de actividades realizar.

2.- POR QUE se quiere hacer, origen y fundamentación del programa o proyecto.

3 – PARA QUE se quiere hacer, objetivos del programa.

4.- CUANTO se quiere hacer, expresar los objetivos de manera cuantitativa en metas.

5.-COMO se va a hacer . actividades y tareas, medidas que se han de tomar para llevar a cabo el programa.

6.- DONDE se quiere hacer. localización física y ubicación en el espacio.

7.- CUANDO se va a hacer, calendarización o cronograma.

8.- CON QUE se va a hacer, recursos materiales y financieros.

9.- A QUIENES va dirigido, destinatarios o beneficiarios.

10.- QUIENES lo van a hacer, recursos humanos.

Formato para la elaboración de programas y proyecto

Los programas y proyectos pueden ajustarse a los siguientes elementos que se desarrollan desde lo general hasta lo concreto:

* Naturaleza/Identificación.

La denominación del proyecto se hace de una manera sintética, mediante un título que indica aquello de que se trata (convocatoria de un concurso literario, creación de un centro cultural, organización de una semana cultural, etc)

Además hay que identificar a la institución, agencia y organismo responsable de la ejecución del proyecto o bien indicar el patrocinante del mismo.

* Fundamentación ( en los programas ):

Deben argumentarse los porqués de las prioridades que han llevado a proponer ese programa y sus proyectos concretos. Ha de hacerse alusión necesaria a la situación de necesidades a la que trata de dar respuesta, expresando tanto sus aspectos cualitativos como cuantitativos. Conviene que en orden a la claridad del mensaje se evite una inflación de datos estadísticos, socioculturales, sino tan solo los de mayor significación; el resto, si se considera conveniente puede incorporarse en forma de anexos. Lo mismo puede decirse si se entiende convenientemente incluir en la fundamentación, determinadas referencias a la legislación o normativas institucionales, en las que conviene no abusar de referencias excesivamente amplias. Señalar también los previsibles efectos que tendrá su ejecución en las condiciones actuales de los beneficiarios.

* Objetivos (en programa)

Han de expresarse con claridad los objetivos de carácter general, pero específicos del mismo y que le diferencia de otros programas; es importante que los objetivos sean propios e identificativos.

En el caso de los proyectos, los objetivos deben ser operativos y relacionados directamente con los objetivos del programa de referencia.

Deben explicitarse de manera:

– Clara, de manera que permitan saber qué buscar en la evaluación.

– Específica, para que puedan convertirse en definiciones operativas y hacerse tangibles.

– Medible, para que se pueda aplicar una recogida de datos y un método de análisis.

* Actividades (en proyectos ): .

Las actividades son el conjunto de operaciones propias de una persona o institución, que no deben confundirse con los objetivos. Implican la definición de tareas normas y procedimientos para la ejecución. Se identificarán todas las etapas que debe comprender el proceso técnico. Es decir, el planteamiento de actividades conlleva una determinada metodología

Las distintas actividades se pueden agrupar en:

– Actividades de formación: las que favorecen la adquisición de conocimientos y el desarrollo del uso crítico e ilustrado de la razón.

– Actividades de difusión: las que favorecen el acceso a determinados bienes culturales.

– Actividades de creación. Se incluyen actividades artísticas no profesionales: las que favorecen la expresión y que constituyen formas de iniciación o de desarrollo de los lenguajes creativos y de la capacidad de innovación y búsqueda de nuevas formas expresivas.

También puede proceder aquí, en este momento de la elaboración del proyecto, relatar las técnicas que se emplearán

Para la realización de cada una de las actividades de animación cultural existe una y en algunos casos varias técnicas simultáneas. Cuando existe un sólo procedimiento para llevar a cabo una actividad, de lo que se trata es de usa esa técnica de la manera más eficaz posibles. Pero cuando existe una gama de técnicas alternativas el problema que se plantea es el de seleccionar una de las técnicas. Ahora bien, si hay que seleccionar entre diversas técnicas. lo que debemos tener bien claro, son los criterios de selección de técnicas. En esto evidentemente, subyacen elementos extra-técnicos de carácter ideológico-políticos. La técnica es instrumental, y por lo tanto, la intencionalidad con que se las usa, depende de un marco claramente ideológico-político.

* Ambito de aplicación (En programa y proyectos):

Es necesario especificar el lugar geográfico en el que se va a realizar el programa o proyecto, así como al tipo de población al que va dirigido y el número de personas, grupos e instituciones. posibles destinatarios de las prestaciones.

* Recursos

Este apartado debe incluir todo aquello que se necesita para cumplir los fines del Programa, en cuanto a:

– Personal

– Inversiones

– Mantenimiento

– Gastos vinculados a la actividad (ayudas individualizadas, desarrollo de actividades, etc.

En los programas se contabilizan todos los recursos necesarios, y en los proyectos los específicos del mismo.

* Presupuesto.

Todo presupuesto debe inevitablemente contemplar tanto las fuentes de Financiación del mismo, (ingresos), cuanto los gastos que conlleve disponer de los recursos necesarios. Así en todo presupuesto ha de contemplarse:

– Gastos: Incluye todos los costes de recursos que son necesarios para llevar a cabo el programa o proyecto. Así será necesario contemplar, los gastos de personal (incluyendo el propio del programa o proyecto, y el colaborador o a tiempo parcial, así como las contrataciones puntuales que requieran el desarrollo de determinadas actividades); El uso de instalaciones o medios materiales, en su caso las inversiones que fueran necesarias, y las cuantías necesarias para procurar atenciones individuales o para llevar a cabo actividades previstas ( campañas de difusión, reuniones, viajes, charlas, exposiciones, talleres, etc,). Sin olvidar que en ocasiones la propia evaluación del programa o proyecto puede conllevar un componente de gasto específico en forma de colaboraciones técnicas, tratamiento de datos,

Ingresos: En este capítulo es necesario especificar cuales son las aportaciones de la propia institución responsable del programa o proyecto, y aquellas que provienen bien de trasferencias externas (subvenciones, convenios con otras instituciones, etc.) o bien de ingresos que genera la propia actividad (cuotas, ventas, aportaciones de usuarios, etc.)

El presupuesto puede ser, a veces, lo primero que hay que tener en cuenta (al menos en su aproximación), a la hora de formular un programa de modo realista, eficaz y eficiente, ya que puede ser con mucha frecuencia quien nos hace el encargo institucional, ya tenga previsto un determinado nivel de recursos para el mismo, del que apenas podremos salimos. En este caso conviene recordar uno de los requisitos mencionados para la planificación es el que los fines tienen que ser posibles.

* Temporalización

Calendario de actividades. Servirá de base para la confección de los gráficos de apoyo, especialmente para hacer cl cronograma a gráfico de Gantt.

9. – MODELOS DE PROYECTOS

A continuación exponemos tres modelos de proyectos que nos pueden servir de orientación acerca de la diversidad de proyectos que se pueden diseñar desde la animación cultural como forma de intervención. La variedad de proyectos es infinita pues, incluso, proyectos con el mismo nombre y los mismos objetivos pueden ser muy distintos dependiendo de como se conjuguen todas las partes del mismo, es decir de las técnicas que se empleen, de los recursos, de los promotores del proyecto, etc.

9.1. Proyecto de “Difusión Cultural

Naturaleza del proyecto:

Se trata de establecer un convenio de colaboración entre una Diputación Provincial y los municipios de la provincia, con el objeto de programar actividades de difusión cultural durante el verano.

Objetivo

Se enmarca dentro de un programa de difusión cultural que pretende acerca a los habitantes de una provincia distintas manifestaciones artísticas. Así como facilitar a todos los municipios información sobre los recursos culturales de la provincia. Contribuir al mantenimiento de los grupos artísticos de la provincia.

Destinatarios

Todos los municipios de una provincia. La oferta se dirige a los ayuntamientos y son ellos los que gestionan las actividades culturales . cofinanciadas por la Diputación Provincial.

Localización

En todos aquellos municipios que se acojan a un convenio de colaboración con la Diputación Provincial.

Desarrollo y calendario

– Primera fase: contacto con grupos de la provincia de música, teatro. títeres. etc.. dispuestos a participar en esta iniciativa. En el mes de abril.

– Segunda fase: oferta a los municipios. Se articula en base a un convenio de colaboración en el que se especificarán las aportaciones de las partes. En el mes de mayo.

– Tercera fase: recepción de demandas y elaboración definitiva de calendario de actuaciones. En el mes de junio. Además se hará el contrato con los grupos y convenios con los ayuntamientos.

– Cuarta fase: realización efectiva de las actuaciones. De julio a septiembre.

Recursos que se utilizarán

– Los grupos artísticos de la provincia.

– Financiación económica compartida entre diputación y ayuntamiento.

– Cartel general de actuaciones.

– Programas de mano.

– Medios de comunicación.

9.2.- Proyecto de dinamización cultural en un barrio

Naturaleza del proyecto

Analizar los recursos culturales de un barrio y una vez estudiados plantear la dinamización de la vida cultural. Se trata de que el barrio se vaya dotando de organizaciones y de grupos que resuelvan las necesidades culturales. Los Servicios Culturales del Ayuntamiento se han de limitar a crear o facilitar las condiciones que permitan a las organizaciones el llegar a estructurarse con dinamismo propio. Los miembros del barrio han de ser los propios protagonistas de esa dinamización.

Objetivos

Crear espacios de encuentro o revitalizar los ya existentes.

Programar actividades culturales de interés para los distintos sectores sociales y en general para la comunidad.

Destinatarios

Los grupos formalmente constituidos y también grupos informales. Los animadores informales. voluntarios y en general la comunidad que habita en el barrio.

Fases del proyecto

– Creación de un Centro Cultural con recursos de la Administración y de la comunidad de vecinos. según la fórmula de cogestión paritaria.

– Elaboración de un documento donde se explicitan las líneas programáticas y los compromisos institucionales.

– Aportación, desde el Ayuntamiento , de recursos económicos, de personal y de infraestructura para programas anuales de actividades culturales de las asociaciones.

Técnicas para desarrollar el proyecto

1.- Reuniones de contacto con las personas claves del barrio.

2.- Reuniones con colectivos específicos. Estudiar sus necesidades y demandas.

3.- Grupos de discusión con colectivos para concretar y canalizar actividades.

4.- Puesta en marcha de actividades concretas.

5.- Seguimiento de las mismas.

Recursos que se utilizarán

– Animadores profesionales. Animadores no formales.

– Educadores de adultos.

– Monitores de talleres.

– Los recursos financieros serán los propios de un programa de dinamización cultura de un ayuntamiento.

– Recursos económicos y humanos de las organizaciones.

Proyecto para fomentar la creatividad en los jóvenes

Naturaleza del proyecto

Organización de un concurso de pintura rápida, teniendo como tema el entorno de una ciudad.

Objetivos

Estimular la capacidad creativa de los jóvenes y potenciar las actividades artísticas en la ciudad.

Destinatarios

Los jóvenes

Desarrollo

– Convocatoria del concurso

– Realización del concurso

– Selección de obras presentadas

– Asignación de premios

– Exposición

Recursos

– Agente cultural que lo organiza

– Recursos financieros para los premios

– Carteles anunciadores y programas de mano

– Sala de exposiciones

Técnicas

– De comunicación social a través de la prensa escrita, carteles y medios de comunicación local.

9.- INSTRUMENTOS DE EVALUACION

La evaluación de los programas de animación cultural consiste en comparar los resultados con los objetivos propuestos, emitiendo un juicio valorativo sobre los resultados y dilucidando que factores contribuyen al éxito y que aspectos deben corregirse. Para ello, hemos de recopilar una serie de informaciónes.

Los instrumentos de evaluación son los que nos permiten recopilar dicha información. A continuación se recogen algunos instrumentos básicos de recogida de información y algunas de sus aplicaciones.

RECOPILACION DOCUMENTAL: Se recaba información de documentos escritos.

Aplicación: se trata de una técnica básica que no interfiere en los procesos. En cualquier caso es recomendable siempre y cuando se contraste la información con la utilización de otras técnicas.

OBSERVACION:

– Estructurada: Se definen a priori las categorías que se van a observar.

– No estructurada: no se definen a priori las categorías que se van a observar. El observador es un participante más.

– Aplicación. de interés cuando lo que se observa es algo concreto y se quiere que varios observadores focalicen su atención en la misma cosa. De interés cuando el observador forma parte del proceso en el que los observados están implicados. Más subjetiva.

ENTREVISTA:

– Estructurada: cada uno de los entrevistados lleva un mismo guión fijo con preguntas concretas para hacer.

– Semiestructurada o no estructurada: se lleva un guión flexible de temas a tratar o no se lleva guión.

Aplicación: Conveniente cuando se utilizan varios entrevistados y nos interesa saber lo que piensan el conjunto de los entrevistados sobre temas determinados. Oportuna cuando se sospecha que se puede obtener información interesante que no se tiene predeterminada.

ENCUESTA O CUESTIONARIO:

Permite recabar información sin la presencia de un experto y de mucha gente simultáneamente. Puede ser de preguntas cerradas o de preguntas abiertas.

– Aplicación: Más fácil de codificar cuando tenemos muchas respuestas. Buena para obtener porcentajes. Los cuestionarios de preguntas abiertas generan más información y permiten que la gente se exprese en sus propios términos.

GRUPO DE DISCUSION:

Un grupo discute sobre un tema y luego se analiza el discurso.

– Aplicación: Cuando nos interesa saber el discurso social latente.

OTROS INSTRUMENTOS: Debates, tormentas de ideas, etc.

– Aplicación: Adaptable a cada situación. Fomenta la participación

ESCALAS O INSTRUMENTOS ESTANDARIZADOS:

Son escalas o test ya preparados, como escalas de personalidad, diferencial semántico, etc.

– Aplicación: Hay pocos elaborados que sirvan para la evaluación de procesos de animación cultural. Hay que utilizarlos con cautela, sabiendo bien los limites que tienen y lo que significan sus resultados.

MEDIDAS NO INTRUSIVAS:

Son cualquier manera de recopilar información o medir sin que eso suponga intervenir directamente para esa recopilación.

– Aplicación: Pueden ser siempre un apoyo a otras técnicas y normalmente no suponen un esfuerzo grande adicional. Suelen ser un buen recurso poco empleado por falta de imaginación.

LOS INDICADORES DE EVALUACION:

Un indicador es una unidad de información que nos señala si un cierto criterio de evaluación ha sido dado o no. Por ejemplo, algunos indicadores que midan el grado de participación en un taller de animación cultural pueden ser el “numero de asistentes” y la “variedad de personas”, “hay predisposición a participar en las actividades que se proponen”, “todos intervienen de igual manera”, “es heterogéneo el grupo”.

Los indicadores podrán ser cuantitativo o cualitativos.

Formular indicadores puede ayudar a especificar los criterios o preguntas de evaluación; también a sistematizar la búsqueda de información.

11.-ORGANIZACION DE LOS RECURSOS

Para la realización de programas y proyectos de animación cultural se debe de tener en cuenta la organización de los recursos en lo referente a los aspectos materiales, económicos, financieros y técnicos.

11.1.- Recursos Humanos

Para ejecutar cualquier tipo de proyecto hay que disponer de personas adecuadas y capacitadas para realizar las tareas previstas. Esto supone organizar los recursos humanos especificando la cantidad de personal, la cualificación requerida y las funciones a realizar. Cuando la índole del proyecto así lo requiera hay que indicar la necesidad de capacitar los recursos humanos que exige la realización del proyecto. En este caso hay que establecer cuándo y con qué cualificación se ha de tener el personal que se necesita

Para poner en práctica los proyectos de animación es necesario organizar los recursos humanos a través de la consideración del trabajo en equipo.

Hemos de considerar el equipo de trabajo como una estructura, con su composición, sus funciones y dinámicas. Hemos de considerar el equipo de trabajo como una conducta de grupo que se produce a través de la reunión y las diferentes formas de interacción.

El equipo de trabajo multiplica las posibilidades de acción social y tiene acceso a proyectos de mayor alcance que las personas que trabajan aisladamente.

Las funciones que un equipo debe resolver son múltiples:

– analizar la realidad

– programar la acción

– realizar las actividades

– coordinarse y autodirigirse

– interconexión y proyección

– evaluación y seguimiento

– formación

– apertura a nuevos planteamientos

Los elementos que conforman la estructura de un equipo son:

– las partes en las que se divide el equipo (cargos, comisiones, órganos, etc.).

– las funciones y su adscripción a las diferentes partes y al todo.

– las relaciones funcionales existentes entre las partes.

11.2. Recursos Económicos

Los dos aspectos más importantes en cuanto a los recursos económicos son, por un lado, los presupuestos, y por otro, los sistemas de financiación.

Los presupuestos conllevan una serie de riesgos que van desde la inflexibilidad al detallismo en exceso. Los presupuestos son una forma de controlar la asignación de recursos para la consecución de las metas propuestas. Hay cuatro tipos básicos: de gastos e ingresos; de tiempo, espacio, materiales y productos; de efectivo; y de balances generales. Se puede hablar también de diferentes formas de presupuestación: por programas, por partidas.

Es importante tener en cuenta y utilizar los diferentes sistemas de financiación, incluso en programas o actividades propiciadas por Instituciones Publicas. Existen diferentes vías de financiación: las subvenciones, los patrocinadores o sponsors y las actividades de financiación propia.

11.3. Recursos materiales

En cuanto a la infraestructura espacial y material, y en concreto los espacio físicos en los que se llevan a cabo los procesos de animación cultural, deben tener un carácter de referente y ser multifuncionales, creativos y abrir puertas a la interconexión.

11.4. Recursos técnicos

Se han de establecer las alternativas técnicas propias de la animación cultural:

– Técnicas grupales.

– Técnicas de información-comunicación.

– Técnicas para la realización de actividades artísticas.

– Técnicas para la realización de actividades lúdicas.

– Técnicas de gestión de recursos y entidades.

Bibliografía

– ANDER-EGG. E. La animación y los animadores. Narcea. Madrid. 1989

– CASTRO de, A. La animación cultural. Nuevas perspectivas. Popular. Valladolid

– QUINTANA, J.M. Los ámbitos profesionales de la animación. Narcea. Madrid. 1993


[1] En el tema 23 se estudian con detalle las distintas nociones de cultura.